Los dueños de las embarcaciones argentinas sugieren que se trata de un “castigo político” por parte del gobierno de Alberto Fernández y se quejan de la falta de solución al conflicto.
Alrededor de 200 embarcaciones argentinas amarradas en el puerto de Punta del Este en la península uruguaya, después de casi dos años sin poder ingresar a Argentina por la pandemia de coronavirus. Los dueños de las embarcaciones sugieren que se trata de un “castigo político”.
Se trata de una medida de Sanidad de Fronteras, dirección que depende del ministerio de Salud de la Nación. Para quienes al parecer no son suficientes la declaración jurada y el PCR negativo.
Una gran parte de los viajeros que eligen las costas esteñas para pasar sus vacaciones lo hacen en embarcaciones comerciales, como Buquebus, Colonia Express o en los cruceros de pasajeros. Y tanto los puertos de los buques turísticos como la terminal de cruceros Quinquela Martín son “corredores seguros”, según fuentes de Prefectura Naval de Argentina. Sin embargo, indicaron que “los mismos no están habilitados para el ingreso de embarcaciones deportivas”, es decir privadas.
“Se les informa por parte de esta autoridad marítima [Prefectura Naval Argentina] que previo regreso a la Argentina deberá prever las condiciones en las que se encuentra el país”, dice un documento, a modo de declaración jurada, que los dueños de las embarcaciones deben firmar antes de salir de territorio nacional.
En ese marco, responsables de la autoridad marítima nacional dejan trascender que, pese a la falta de corredores seguros, hoy se está trabajando en la posibilidad de habilitar alguno. Pero aún no hay confirmaciones de ningún tipo.
“Ya cuando hicimos el trámite para despachar el barco, la persona que nos atendió nos dijo que es una medida de corte político, que no los quieren dejar entrar por ideología”, sostuvo el dueño de uno de los barcos en diálogo con el medio La Nación.
El enojo de los dueños de las embarcaciones varadas escala día a día ya que deberán volver a sus hogares en otro medio de transporte y dejar su barco amarrado en aguas uruguayas con el costo que ello implica.
Diferente es la situación de los participantes de la regata organizada por el Yacht Club Argentino y el Yacht Club Punta del Este, Rolex Circuito Atlántico Sur 2022, que zarpa desde la Argentina el 15 de enero, con regreso el 22. Los concursantes tendrán un permiso especial para volver al país.
Fuentes: Minuto de Cierre y La Nación













