Óscar Washington Tabárez, no admite que su ciclo al frente de la selección de Uruguay ya terminó y que lo mejor que puede hacer es irse con dignidad y no seguir intentando hacernos creer que algo va a cambiar.
No admite que su fútbol caducó hace ya mucho tiempo. No hay ideas y menos estrategias acordes con la actualidad. El fracaso es evidente y no da para más.
No son de recibo sus apreciaciones luego de tantas derrotas y tampoco piensa en dar el necesario paso al costado: “no es un momento de hablar mucho, todos habrán visto lo que pasó. Nosotros esperábamos algo distinto en nuestro cálculo de probabilidades”, dijo hoy luego de perder con Bolivia, demostrando que a pesar de ser maestro de escuela, hacer cálculos no es su fuerte.
Sobre la renuncia: “no sé quién me puede exigir eso a mí, sobre todo después del tiempo de trabajo”
En la conferencia de prensa al final de la nueva goleada y ante el cúmulo de derrotas, Tabárez respondió ante la consulta de si renunciaba: “No, porque yo soy un profesional de esto, tengo contrato y ahí dice todo lo que tengo que hacer. Ese tipo de decisiones se toman a otro nivel y se respetarán como se hace siempre, porque no sé quién me puede exigir eso a mí, sobre todo después del tiempo de trabajo que yo estuve acá, no considero irme tirando la toalla, no quiero hablar más porque voy a decir algo de más”.
Lo que dicen las redes sociales
https://twitter.com/dflatorre/status/1460731130118909956
https://twitter.com/MartinCharquero/status/1460729133206544387
https://twitter.com/RodrigoRomano76/status/1460758932394237953
https://twitter.com/Alfredolara29/status/1460741018916167681
¿La AUF está pintada?
A esta altura, la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), parece no estar a la altura a las circunstancias. Creyó en las promesas del anciano entrenador que las cosas se iban a revertir en el segundo partido con Argentina y luego con Bolivia y nada cambió, las derrotas se suceden.
No conozco, como aficionado al fútbol, los méritos del dirigente Ignacio Alonso para presidir la AUF, pero él y los demás dirigentes, deben ahora cambiar el rumbo de un proceso fracasado. Es inadmisible que Tabárez intente imponer quedarse luego de la vergonzosa serie de fracasos.
Vale recordar que cuando la última Copa América, disputada en Brasil, Tabárez dijo algo que queda grabado y es elocuente: “No sentimos la obligación de salir campeones de la Copa América”.
El proceso de 15 años para no sentir la obligación de ganar un campeonato.
Todo dicho.
Este ya tristemente célebre personaje, se nos ríe en la cara con una soberbia imperdonable. La AUF lo debe cesar ahora.
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