La diputada Lilián Galán y la tergiversación del pasado reciente en Uruguay

0
281
Alejandro Otero y Fernández Huidobro en la entrevista publicada en el Nº 144 del semanario Mate Amargo en julio de 1998 - El reconocimiento de que si existió una guerrilla armada en Uruguay

Es lamentable que se trate de inculcar una versión falsa sobre la guerrilla tupamara que azotó al país, desde muchos años antes del golpe de Estado de 1973 y que hoy, una diputada del MPP, Lilián Galán, intente “vendernos” otra historia justo a quienes vivimos esa época nefasta y que conocemos de primera mano lo que ocurrió, resulta imperdonable.

Tal vez la diputada Galán, en su condición de profesora de historia, debió debió estudiar más los hechos y no tergiversar lo que verdaderamente ocurrió.

Cuando llegó el nefasto golpe de Estado,  el 27 de junio de 1973, la hoy legisladora del MPP, tenía – según Wikipedia- 12 años (23 de setiembre de 1961) y desde esa tierna edad parte su “conocimiento” distorsionado de esos años.

Días atrás, se recordó en un evento público el 38º aniversario del “Río de libertad”, la enorme concentración llevada a cabo en el Obelisco a los Constituyentes, que dio inicio a la recuperación de la democracia en nuestro país.

Sobre este acto recordatorio Montevideo Portal cuenta: “En el marco de las acciones para recordar tan importante fecha, la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia de la República organizó en el Palacio Legislativo una actividad de “intercambio sobre Democracia en clave de futuro”, al que “estaban llamados a participar “todos los jóvenes de todos los partidos políticos con representación parlamentaria”

En el inicio del evento hizo uso de la palabra Rosario Pérez, titular de la mencionada secretaría. Durante su alocución, la funcionaria expresó entre otras cosas que, más allá de la dictadura en sí misma, los años previos a ella fueron “difíciles de transitar “.

La nota agrega que “El país venía de una situación en que el surgimiento de los movimientos guerrilleros ya había horadado los derechos de la población”, dijo Pérez, para luego enumerar “huelgas, paros, ataques sorpresivos, robos, saqueos”, como elementos debilitantes de la democracia y catalizadores del golpe de Estado, sin para mientes en que los dos primeros mencionados (huelgas y paros) son herramientas de reivindicación absolutamente legales, a diferencia de los otros (ataques sorpresivos, robos, saqueos).

“El golpe de estado fue consecuencia del deterioro que atravesaba el país y hubo una parte de la población que incluso sintió que los militares eran la solución para un país en declive”, añadió.

Fue entonces que la diputada Galán, abandonó el acto por discrepar con las palabras de Rosario Pérez y acudió a las redes sociales para demostrar su enojo, sin recordar que el Partido Comunista de Uruguay (PCU), “respaldó” los comunicados 4 y 7 de los militares golpistas.

https://twitter.com/liliangalan1/status/1465453030183157766

Entonces, lamento decirle a la legisladora emepepista, que lo que dijo la titular de la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia, se ajusta a la realidad de lo que ocurrió.

Para ejemplificar lo dicho, le debo recordar a la diputada Galán, que las acciones delictivas de la guerrilla tupamara, comenzaron en la década de los años sesenta y yo, como muchos orientales, las vivimos y padecimos, durante gobiernos democráticos elegidos libremente en las urnas.

Tal vez la parlamentaria del MPP, no recuerde y sea un nube la que le impide ver los hechos y le cuento para aydarla en su ejercicio de memoria:

Quizás no recuerde a la figura del entonces comisario Alejandro Otero, que enfrentó las acciones de los tupamaros y que fue una personalidad destacada por los propios tupamaros por la limpieza con que los enfrentó y derrotó.

El comisario Otero y Fernández Huidobro

El ex líder de los Tupamaros, Eleuterio Fernández Huidobro, dijo en el semanario Mate Amargo, el 2 de julio de 1998 en una entrevista que él mismo le hizo al comisario Otero:

A fines del ’66  y a fines del ’70. Siempre reconocimos que si en aquel entonces no hubieran intervenido otros comisarios y otras dependencias que se creían mejores, Otero nos hubiera liquidado.

Más cerca en el tiempo, Fernández Huidobro escribió el 26 de febrero de 2009, en su columna del diario uruguayo La República, sobre la actuación del policía:

“el por entonces jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia y Enlace de la Policía, comisario Alejandro Otero; una de las autoridades máximas (y a nuestro juicio la más eficiente y por tanto peligrosa para nosotros) en la represión contra los Tupamaros”.

Después de estas contundentes afirmaciones de Fernández Huidobro, que están registradas, usted diputada, no puede decir, “Es erróneo afirmar que en nuestro país hubo guerrilla”, es como burlarse de todos y cada uno de los uruguayos.

El expresidente de Uruguay entre 2000 y 2005, Jorge Batlle, ha señalado que “Fue en 1962 cuando los uruguayos se enteraron de que existía en el país un movimiento armado que pretendía, por las armas, ocupar el gobierno. En 1962, luego de un tiempo de preparación y trabajos, el Ex Presidente de la República José Mujica y el actual Ministro de Defensa Eleuterio Fernández Huidobro, asaltaron y robaron las armas del Tiro Suizo en Colonia Suiza. Ese primer acto revolucionario de la guerrilla tupamara tuvo lugar al comienzo del gobierno democrático presidido por un hombre republicano de clara consciencia democrática a lo largo de su historia política llamado el Dr. Washington Beltrán”.

Más adelante Batlle señalaba en su columna de opinión: “La guerrilla fue enfrentada por la policía, particularmente por el Comisario Alejandro Otero, que ya había denunciado su existencia a las autoridades policiales de Montevideo”.

“Sin guerrilla no hubiera habido Golpe de Estado Militar”

En sus artículos el expresidente Jorge Batlle profundizaba en la historia reciente y contaba cuando los militares lo detuvieron a él por afectar la honra y el buen nombre de las Fuerzas Armadas: “En 1972, en el mes de octubre, desde la televisión nacional, anuncié al país que las Fuerzas Armadas iban a dar un Golpe de Estado. Me llevaron preso, me juzgaron en la Justicia Militar en el Juzgado de la calle Lauro Muller y me condenaron por afectar la honra y el buen nombre de las Fuerzas Armadas, que por supuesto en 1973 dieron un Golpe de Estado.
La conclusión más que clara de este relato es que si no hubiera habido un movimiento sedicioso revolucionario, no hubiera habido Golpe de Estado militar”, aseveró Batlle.

Mujica reconoce que los tupamaros nunca combatieron a la dictadura militar en Uruguay

Durante mucho tiempo se intentó imponer una versión falsa de que la guerrilla tupamara del Movimiento de Liberación Nacional MLN, que Mujica integraba, había iniciado sus acciones para enfrentar a la dictadura militar que comenzó en 1973, pero ninguna fecha coincide porque los tupamaros comenzaron a actuar en la década de los ’60 con robos, secuestros y homicidios durante gobiernos democráticos elegidos en las urnas.

El expresidente José Mujica, a pocos días de dejar definitivamente su escaño en el Senado, debido a su edad (85 años), dio una extensa entrevista al diario El País de Montevideo, donde hizo referencia a varios temas del pasado y de su gestión cuando le tocó ejercer la presidencia de Uruguay.

En la entrevista el periodista le dice a Mujica: -“El presidente del directorio del PN, Pablo Iturralde, ha dicho que los tupamaros deben unas disculpas al pueblo uruguayo”.

Mujica respondió –“Sí, se las debo. Cuando el pueblo uruguayo nos precisó para pelear en la calle, para enfrentar la dictadura, no estábamos, estábamos en cana (presos). Esa es la disculpa que le doy”.

-“¿Y por los hechos de sangre?”, preguntó el periodista del diario El País y Mujica dio su respuesta:

“Eso también. Pero como guerrilla debe de haber sido la cosa más civilizada que ha habido en la historia de América Latina, porque acá una vida cuesta mucho”, dijo Mujica, tratando de minimizar los homicidios cometidos por la banda sediciosa.

La tergiversación de la historia de la diputada Galán, queda desvirtuada y sería interesante que vaya a desmentir a su líder, Mujica, que lo que él admite como “guerrilla”, de la cual fue protagonista, nunca ocurrió.