Ciudadanos (Cs), el partido veleta de España, parece tener los días contados para su inminente desaparición de la escena política nacional.
Inés Arrimadas, presidenta de la formación naranja desde la partida de Albert Rivera, nunca dio con el tono para el cargo que heredaba. Su escasa visión política lo llevó a cometer errores políticos y en su afán por trascender, hizo todo lo posible para la debacle que -sin dudas- marcará el triste destino de Cs, con su ya inminente desaparición, sin posibilidades de levante.
Cuando la ambición puede más que la razón
La extraña percepción de la realidad de Arrimadas, se llevó por delante a todo el partido y sus negociaciones con el gobierno del PSOE para dinamitar a su socio -el PP- en algunas comunidades, no hizo más que provocar la espantada de varios de sus dirigentes y militantes que no apoyaron sus acciones.
Según informaba el diario El Mundo, el pasado 10 de marzo, Ciudadanos y el PSOE se unieron en la Región de Murcia para intentar tumbar, en una moción de censura, al Gobierno de Fernando López Miras (PP). Como es sabido, fracasaron.
Tres meses después, el Barómetro de primavera del Centro de Estudios Murciano de Opinión (Cemop) arroja una conclusión clara: los ciudadanos de la región castigan a Ciudadanos y PSOE y refuerzan al PP, al que dejan al borde de la mayoría absoluta.
La presidenta de Cs, no tuvo reparos en arrodillarse ante Pedro Sánchez para lograr sus fines y lo hizo de una manera tan poco inteligente que hoy, por su iniciativa, su partido desapareció totalmente de la Asamblea de Madrid donde perdió sus 26 escaños, tras dos años gobernando con el PP.
Begoña Villacís: ¿Dónde voy, quién soy, qué hago?
Begoña Villacís es la vicealcaldesa de Madrid, por acuerdo con el PP y en representación de Ciudadanos y como Arrimadas, tampoco tiene claro que es la política.
Lo que si sabe Villacís es que debe hacerse notar y que son sus últimos cartuchos para disparar porque Cs, cae estrepitosamente y como ya se vio en la debacle en la comunidad madrileña, su partido no obtendría concejales en venideras elecciones al ayuntamiento.
Por ello, Begoña Villacís navega en un mar de desesperación y eso le lleva a cometer errores insalvables que lo único que hacen es precipitar la caída de los naranjas.
Se alía con el PSOE y no comprende que eso la aleja aún más de los votantes. Las recientes malas experiencias en Murcia y en la Comunidad de Madrid, no la hicieron recapacitar.
Los hechos protagonizados por Arrimadas y Villacís, adelantan el triste y solitario final de una formación como Ciudadanos que vende su alma a quien quiera comprarla, pagando unos miserables y efímeros momentos de poder.