Me gustaría preguntarle al ex secretario general del Partido Comunista de Uruguay (PCU), Eduardo Lorier: ¿Por qué mete a todos los uruguayos en la misma bolsa?, cuando en un comunicado emitido en Cuba, asegura que “Sabemos que [Lacalle en la Celac] no habló en nombre del pueblo uruguayo, el cual es amigo y hermano del pueblo cubano. Le manifestamos a Cuba nuestro permanente respeto y agradecimiento”.
Señor Lorier, se puede ser amigo del sufrido pueblo cubano por lo que padece en manos del régimen, pero muchos uruguayos, jamás tendríamos amistad con la dictadura que oprime y encarcela a sus ciudadanos, no permite elecciones libres y democráticas y reprime salvajemente a los que no se subordinan a sus intereses. Si mal no recuerdo, usted se vio beneficiado de la democracia uruguaya cuando fue electo legislador por el PCU. Una libertad que permite varias opciones al momento de votar, todo lo contrario de lo que ocurre en Cuba donde sólo se autoriza al Partido Comunista y no existen otras posibilidades para la oposición.
Lacalle Pou no hizo más que decir la verdad de lo que ocurre en Cuba y no lo dijo espaldas del castrismo, lo hizo en la cara del dictador Díaz-Canel y todavía le recitó una parte del hermoso himno libertario: “Patria y Vida”.
Su desconocimiento, señor Lorier, de temas sociales y/o políticos quedó demostrada en junio del 2005, cuando se metió a negociar, sin conocimiento de causa, en un motín de menores en la Colonia Berro del INAU con toma de rehenes y todo terminó de la peor manera. ¿Lo recuerda?.
Sin recurrir a los consejos de expertos, Eduardo Lorier, en ese entonces senador de la República, resolvió con su compañera del PCU, la ministra Marina Arismendi, ser él el conductor del vehículo con los menores amotinados y luego fue obligado a desviarlo mediante amenazas, incluso recibió un corte en el cuello. Todo improvisado sin medir las consecuencias.
Lorier argumentó que se presentó para colaborar, cuando se enteró del motín y que condujo la camioneta dado que el chofer se negó a hacerlo porque los menores estaban armados, al tiempo que rechazó haber actuado con ingenuidad.
No creo que Lorier fuera ingenuo, más bien incompetente.
Le pido, señor Lorier que hable en su nombre y no asuma que la mayoría de los uruguayos pensamos igual que usted. Solidaridad con el pueblo cubano si; con el régimen que no permite opinar diferente, jamás.
¿Se olvida usted que hoy Uruguay es refugio de miles de cubanos que salieron del infierno para vivir en democracia?
Excelente artículo que pone en su lugar a un personaje que intenta falsear la realidad. Yo tampoco acepto que Lorier hablé en mi nombre como uruguayo.
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