El ministro de Economía de Argentina, Martín Guzmán, hombre del riñón del presidente Alberto Fernández, había despedido por ineficiente al subsecretario de Energía, Federico Basualdo, hombre respaldado por Cristina Kirchner y La Cámpora, el grupo liderado por el hijo de la vicepresidenta, Máximo Kirchner, quienes bloquearon el despido de Basualdo.
Lo que molestó al presidente Fernández es que Guzmán hiciera público el despido de Basualdo a través de las redes sociales y mantuvo al subsecretario que responde a Cristina Kirchner, a pesar de coincidir que Basualdo es ineficaz en esta función.
Según consigna el portal argentino Infobae, Alberto Fernández, Santiago Cafiero, Matías Kulfas y Guzmán consideran que la política energética, la posibilidad de mejorar los servicios y favorecer a los sectores más pobres no avanza por la incapacidad burocrática de Basualdo.
Se asegura que Cristina Kirchner está de acuerdo con el cese de Basualdo, pero considera que no es el estilo y la forma que utilizó el ministro Guzmán para echarlo y que deja en mala posición al kirchnerismo.
Se presume que Basualdo renunciará al cargo, pero cuando baje la exposición mediática de su caso.
Según analistas políticos, se aguardan más capítulos de esta novela, donde vencerá quien tenga más poder dentro del gobierno.
