En un comunicado, el ente rector del fútbol de Europa, la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (en francés, Union des Associations Européennes de Football -UEFA), se ha opuesto a la decisión de doce grandes clubes europeos que anunciaron este lunes la creación de una nueva “Superliga”, un torneo privado que constituye una declaración de guerra a la que la UEFA anunció que responderá con duras sanciones contra esos clubes y sus jugadores.
Los clubes rebeldes que fundan la Superliga son: Manchester United, Liverpool, Arsenal, Chelsea, Manchester City, Tottenham, FC Barcelona, Real Madrid, Atlético Madrid, Juventus, Milan, Inter Milán, pero se espera que otros equipos se unan a la iniciativa, aunque varios se negaron.
La EUFA anuncia que de concretarse esta Superliga, “tal y como anunciaron previamente la FIFA y las seis Confederaciones, los clubes afectados no podrán participar en ninguna otra competición a nivel nacional, europeo o mundial, y sus jugadores podrían verse privados de la oportunidad de representar a sus selecciones nacionales”.
Las selecciones de fútbol sudamericanas se quedarían sin sus jugadores que militan en Europa, porque la FIFA y la UEFA los sancionarían impidiéndoles representar a sus países.
El duro comunicado de la UEFA
La UEFA, la Federación de Fútbol Inglesa y la Premier League, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y LaLiga, y la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) y la Lega Serie A han tenido conocimiento de que algunos clubes ingleses, españoles e italianos podrían estar planeando la creación de una Superliga cerrada.
Si esto ocurriera, queremos reiterar que nosotros -la UEFA, la FA inglesa, la RFEF, la FIGC, la Premier League, LaLiga, la Lega Serie A, pero también la FIFA y todas nuestras federaciones miembro- permaneceremos unidos en nuestros esfuerzos para detener este cínico proyecto, un modelo que se basa en el interés propio de unos pocos clubes en un momento en que la sociedad necesita más que nunca la solidaridad.
Estudiaremos todas las medidas a nuestro alcance, a todos los niveles, tanto judiciales como deportivos para evitar que esto ocurra. El fútbol se basa en competiciones abiertas y en el mérito deportivo; no puede ser de otra manera.
Tal y como anunciaron previamente la FIFA y las seis Confederaciones, los clubes afectados no podrán participar en ninguna otra competición a nivel nacional, europeo o mundial, y sus jugadores podrían verse privados de la oportunidad de representar a sus selecciones nacionales.
Agradecemos a los clubes de otros países, especialmente a los franceses y alemanes, que se hayan negado a suscribirlo. Hacemos un llamamiento a todos los amantes del fútbol, a los aficionados y a los políticos, para que se unan a nosotros en la lucha contra este proyecto si se anunciara. Este persistente interés de unos pocos lleva demasiado tiempo. Ya es suficiente.













