
El régimen chavista es capaz de cualquier tropelía y cada “perlita” que acumula día a día demuestra hasta donde puede llegar el megalómano tirano de Venezuela.
Lo grave es que existan “periodistas militantes” que se arrodillan ante la dictadura de Maduro y traten de tergiversar la realidad pensando que los lectores son imbéciles y que se le puede engañar fácilmente.
Esos periodistas militantes, generalmente asalariados, dicen cualquier barbaridad y ocultan la verdad incuestionable que está a la vista de todos.
Por ejemplo, el vergonzoso fraude gestionado por el ultra chavista Consejo Nacional Electoral (CNE) que acomoda las cifras a su antojo y que los “periodistas” serviles al régimen no mencionan.
En estas elecciones parlamentarias, no hubo candidatos de la oposición compitiendo porque sabían que todo era una farsa, solo montaron desde los servicios de inteligencia de Cuba que dominan al chavismo, un fraude con opositores artificiales en acuerdo con la dictadura chavista.
El diputado Luis Parra, que fingía ser opositor, no consiguió los votos necesarios para entrar en el Parlamento como candidato regional de Yaracuy, pero el CNE chavista “inventó” una resolución fraudulenta y “apareció”, sin explicaciones electo como si hubiera sido candidato por la llamada “lista nacional”, donde no figuraba.
Según informó Infobae, el otro caso lo protagoniza Timoteo Zambrano, líder de la formación Cambiemos, quien compitió en las votaciones respaldado únicamente por su partido y no consiguió los votos suficientes para la victoria. Sin embargo, el CNE informó que gracias a una alianza partidista anunciada después de las elecciones, con los resultados ya conocidos, el dirigente había obtenido un escaño.
Los increíbles veedores internacionales
Maduro, según él, para dar garantías en las elecciones invitó a ciertos veedores internacionales, que como garantes no parecen ser los ideales.
Fernando Lugo, ex presidente paraguayo, destituido por irregularidades por el Parlamento de su país, tiene un historial oscuro cuando era religioso y mientras ejercía como obispo católico, dejó un tendal de hijos y si no lo sacan deja embarazada a media población. Eso si, como católico los reconoció a todos.
Evo Morales, pidió un referéndum en 2016 para poder cambiar la Constitución y que la gente decidiera si le daba o no una cuarta posibilidad de postularse a la presidencia de Bolivia. Perdió el referéndum público, pero no aceptó la derrota y en forma fraudulenta se volvió a presentar en 2019.
Rafael Correa, expresidente de Ecuador, vive refugiado en Bélgica, porque la Justicia de su país lo condenó a 8 años de prisión por el caso “Sobornos”, una causa de corrupción relacionada con las coimas de Odebrecht.
José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno español, nunca fue mediador entre la oposición venezolana y el régimen de Maduro, aunque se presentaba como tal. Sus acciones demuestran que actuó como defensor del dictador chavista y fue denunciado en múltiples oportunidades.
Nada es creíble y el único que sufre es el pueblo venezolano en manos de una dictadura brutal y cobarde.