Por Andrés Fredericksen-
Miles de personas se congregaron durante todo este fin de semana en el centro de la ciudad de Madrid con motivo del primer fin de semana de alumbrado navideño, situación que coincidió con las compras masivas del ‘Black Friday’. Los ciudadanos causaron diferentes aglomeraciones en las principales arterias de la capital española a pesar de estar vigente las restricciones para prevenir la expansión del Covid-19 y vivir aún en tiempos de incertidumbre por el virus.
En esta línea la popular Gran Vía, la Calle Preciados, Puerta del Sol entre otros lugares se vieron desbordados por la gran cantidad de personas que arribaron al lugar durante el día, sin respetar el distanciamiento social establecido para frenar la pandemia, especialmente alrededor de las 19:00 hrs cuando se produjo la hora punta.
A su vez comenzó de plano la campaña navideña con la apertura del Mercadillo de la plaza Mayor, donde se han instalado 56 casetas este año y se ha reducido el aforo para garantizar la seguridad de sus comerciantes y visitantes, sin embargo, cientos de personas se reunieron alrededor de este emblemático lugar.
Por su parte la Policía Municipal estableció un control de acceso en varios puntos a fin de que la situación no se desbordara, poniendo orden en los lugares donde llegó más gente de lo habitual que se venía dando en tiempos de pandemia. De la misma forma las terrazas de los restaurantes pudieron sacar cuentas favorables tras este fin de semana a pesar de que el fantasma del Covid-19 aún sobrevuela la capital española.
“Esto debiera tener un poco más de control ciudadano, no podemos estar meses encerrados para que por un descuido nos tengamos que confinar todos de nuevo”, aseguró a ICN Diario un vecino de Plaza Mayor.
“Es verdad que se ve más gente de lo habitual, pero los madrileños y las personas que vivimos aquí nos gusta salir y disfrutar de las terrazas, más aún cuando estuvimos encerrados durante mucho tiempo”, expresó a ICN Diario una residente argentina en Madrid.
