El gobierno de España informó que el número de personas desempleadas se incrementó en 55.000 en el segundo trimestre del año, hasta alcanzar las 3.368.000, lo que dejó una tasa de paro disparada en el 15,33% en el país a la fecha. Los datos no incluyen los daños de la covid-19 sobre el sector turístico ni a los afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs), ya que estos últimos se consideran personas ocupadas.
El gobierno presenta estos índices luego de vivir el primer mes en “libertad” tras terminar el Estado de Alarma por Covid-19, situación que conllevó a la paralización de gran parte del sector productivo de toda España, generando pérdidas económicas importantes en diversas áreas, al tiempo de ser un durísimo golpe al empleo.
“Servicios fue el sector más afectado, con 816.900 ocupados menos; seguido de Industria, con 127.000; Construcción, con 108.700, y Agricultura, con 21.400. En términos interanuales el empleo se redujo también en todos los sectores, con 922.200 ocupados menos en Servicios, 112.300 en Industria, 107.300 en Construcción y 45.900 en Agricultura”, detalla.
Las cifras las entregó el Ejecutivo en base a la Encuesta de Población Activa que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), donde especifica que el descenso de la ocupación laboral se ha traducido en un incremento de 1.062.800 personas inactivas en el segundo trimestre.
En este contexto el Ejecutivo valoró las medidas establecidas para frenar la destrucción de fuentes laborales en el marco de la pandemia, destacando que los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) están mostrándose eficaces para reducir el impacto en el sector y que éste sea menor que el observado en crisis anteriores.
En términos intertrimestrales, los mayores aumentos del número de desempleados se produjeron en Cataluña, con 61.300 parados más, Comunidad de Madrid, 54.500, y Comunidad Valenciana, 42.500.
Críticas del PP
Por otra parte el presidente del Partido Popular, Pablo Casado manifestó la necesidad de estructurar medidas urgentes para bajar costes fiscales, laborales y burocráticos a fin de recuperar el empleo.
“En España se destruyeron 1,1 millones de empleos en un trimestre, el peor dato nunca visto. A este drama laboral se suman 4,7 millones de desempleados, la mayoría acogidos a ERTE. Urge un plan de choque para bajar costes fiscales, laborales y burocráticos para recuperar el empleo”, dijo.