
Nuevas protestas, hechos de violencia y saqueos estallaron de nuevo el lunes por la noche en diversas ciudades de Estados Unidos por la muerte del afroestadounidense, bajo custodia policial, George Floyd. Los hechos se registraron después de la promesa del presidente Donald Trump de “poner fin a los disturbios y la anarquía”.
A pesar de toques de queda decretados en los principales centros urbanos del país, los manifestantes incendiaron un centro comercial en Los Ángeles, saquearon tiendas en la ciudad de Nueva York, otros lanzaron piedras a la policía en Atlanta, Georgia, y al menos cinco agentes fueron heridos de baja en Minneapolis, Minnesota.
La policía respondió generalmente con gases lacrimógenos que lograron dispersar a algunas multitudes, pero al llegar la madrugada la situación seguía tensa en algunos sectores y algunos focos de manifestantes perduraban.
VOA