
En una operación con medidas de alta seguridad, controlada por efectivos policiales de Uruguay, a cuyo frente estaba el ministro del Interior Jorge Larrañaga, este jueves 14 de mayo desde la base aérea número 1 de la Fuerza Aérea y a las 6.10, en Carrasco, despegó un avión rumbo a Estados Unidos llevando al peligroso líder mexicano del cartel cartel Jalisco Nueva Generación de Los Cuinis, Gerardo González Valencia.
El narcotraficante estaba afincado en el balneario de Punta del Este y había sido detenido en 2016 cuando preparaba su escape e iba a una escuela en busca de sus hijos.
En 2017 Uruguay aceptó dar trámite al pedido de extradición que llegó desde EEUU.
La resolución de la Justicia uruguaya de 2017 señalaba que Estados Unidos debía asegurar que no se juzgará ni condenará a González Valencia por delitos distintos a los que se refiere la solicitud de extradición. También se expresaba que en caso de que Gerardo Gonzalez Valencia resulte condenado en el proceso penal en norteamerica, no se le impondrá pena de muerte.
El Departamento de la Oficina del Tesoro de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos había explicado tiempo atrás que “La organización de tráfico de drogas de Los Cuinis es uno de los más poderosos y violentos cárteles de la droga en México y la calificación (que se le dio en su momento) marca el primer paso en el desmantelamiento de su red de negocios importantes”, dijo John E. Smith, Director Interino de la OFAC. “Estas empresas y particulares ya no serán capaces de operar bajo el velo de legitimidad”.