La sede de la Asamblea Nacional de Venezuela amaneció a tempranas horas de este martes tomada por funcionarios de distintos cuerpos de seguridad, cuando había sido convocada una sesión ordinaria del cuerpo legislativo.
Los diputados consideran la medida como una táctica más del disputado gobierno de Nicolás Maduro para sabotear a la institución.
Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Policía Nacional Bolivariana (PNB) y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) tomaron los alrededores del Palacio Federal Legislativo, ubicado en el centro de Caracas, e impidieron el paso a las instalaciones.
“Están tratando de cerrar por la vía de los hechos el Parlamento nacional, única instancia legítima reconocida por el mundo”, indicó el presidente interino de Venezuela Juan Guaidó, al tiempo que convocó a una nueva sesión para el miércoles 15 de mayo a las 10:00 a.m. en su sede.
“Secuestran a los diputados, cierran o secuestran el Palacio y nosotros seguiremos insistiendo. ¿Qué va a solucionar el régimen con esto? (…) No van a solucionar nada. La única solución es el cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”, indicó Guaidó.
Aseguró que la sede legislativa “no nos hace diputados”. “Nos hace diputados el respaldo, el respeto y la confianza de la gente”, agregó.
“Terrorismo de Estado, es lo único que ofrece hoy Maduro y su combo”, sentenció el líder opositor, ratificando su reconocimiento a los diputados y dirigentes políticos en todo el país.
La primera versión que habría recibido el Poder Legislativo es que los funcionarios estaban respondiendo a la presencia de un supuesto artefacto explosivo. Sin embargo, el presidente de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, aseguró que tras esa “alerta” no se encontró ningún objeto que comprometiera la seguridad de los ciudadanos.
En el orden del día de la frustrada sesión del martes, estaba la discusión sobre la detención del primer vicepresidente Edgar Zambrano y la persecución a los parlamentarios, la crisis económica y el salario mínimo, y como último punto el proyecto de acuerdo sobre el restablecimiento de la vigencia de la Convención Americana de Derechos Humanos.
Para el miércoles se espera que los diputados discutan los mismos temas.
Desde la semana pasada, al menos siete diputados tienen su inmunidad parlamentaria revocada por la oficialista Asamblea Nacional Constituyente después de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) los acusara de traición a la patria y otros siete delitos contra el Estado. Otros tres parlamentarios ya fueron señalados por el TSJ y esperan la decisión de la Constituyente.
Zambrano, detenido el pasado 8 de mayo, está en el primer grupo señalado y tiene prisión preventiva en una cárcel militar. Otros dos se refugiaron en la embajada de Italia en Caracas, otro en la de Argentina y uno decidió exiliarse en Colombia.
En declaraciones a los medios, el parlamentario Juan Pablo Guanipa afirmó que es indudable que “lo que busca la dictadura de Maduro es que la Asamblea Nacional no pueda ejercer las funciones que le confiere la Constitución (…) Toda la comunidad internacional reconoce a la Asamblea Nacional como el poder legislativo legítimo de Venezuela. Y nosotros hoy tenemos la responsabilidad de estar aquí”.
El parlamentario cuestionó la razón por la toma de la sede legislativa y señaló que si la Guardia Nacional está a cargo de la seguridad, “¿cómo pudieron alguna persona colocar esa bomba allí”. “¿Qué están haciendo ellos allí?”, cuestionó.
Voz de América.-