El presidente de Chile, Sebastián Piñera encabezó la ceremonia de conmemoración de los 30 años del plebiscito del 5 de octubre de 1988, instancia que sembró los cimientos para la vuelta a la democracia en la nación austral, al tiempo de poner fin, por medio de las urnas, a la dictadura militar de Augusto Pinochet.
“Estos últimos 30 años de nuestra renovada democracia han sido uno de los mejores, sino el mejor período de nuestra historia. Nuestro país ha vivido momentos estelares en los últimos 30 años, y los chilenos hemos demostrado durante estos momentos estelares la madera de la cual estamos hechos, y hemos podido mostrar nuestras mejores virtudes cívicas, y hemos podido hacer los mayores aportes a ese Chile que todos queremos”, dijo Piñera.
La ciudadanía, en plena dictadura militar, tuvo la oportunidad de votar por dos opciones que eran la correspondiente al “SI”, que permitía la continuidad del dictador hasta el 11 de marzo de 1997, y la alternativa “NO”, que daba paso a que hubieran elecciones democráticas al año siguiente.
Las votaciones se gestaron bajo las leyes de la Constitución política de 1980, la cual había sido aprobada a principios de la década y en la cual el régimen militar se obligaba a sí mismo a someter a un plebiscito la propuesta de Pinochet.
El histórico referéndum convocó a un universo electoral habilitado para votar de 7 435 913 chilenos, quienes con un 54.71 por ciento de las preferencias se impusieron a la continuidad de Pinochet en el poder, ya que el «Sí» obtuvo el 43,01 por ciento, dando paso a las primeras elecciones generales democráticas tras el golpe de Estado propiciado por Pinochet al expresidente Salvador Allende en 1973.
“Ese día 7 millones de chilenas y chilenos, el 97% de los ciudadanos de nuestro país, con un lápiz y un papel, cambiaron el curso de nuestra historia. Estoy convencido que ese día los chilenos tomamos una sabia y necesaria decisión”, dijo el Mandatario.