El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado instó en cadena nacional a deponer la huelga general convocada por los sindicatos del sector público del país para este lunes a fin de rechazar la reforma tributaria propuesta por el Ejecutivo.
En este sentido el Mandatario argumentó que la aprobación del proyecto de ley Fortalecimiento de las Finanzas Públicas es la única forma de evitar una inminente crisis, por lo que su gobierno junto a los actuales diputados y diputadas están tomando el camino de la responsabilidad al atender un problema que se postergó por décadas.
La instancia tiene como objetivo la conversión del impuesto de ventas del 13 por ciento al IVA, con la misma tasa, pero que aumentará la cantidad de productos y servicios por gravar, además contiene una regla fiscal para controlar el gasto y reducciones en pluses salariales en el sector público como las anualidades y modificaciones en otros que se otorgan por rendimiento el trabajador.
Ante esto Alvarado dijo que la huelga es injustificada, improcedente e ilegal, por lo que no se justifica paralizar servicios y afectar a millones de costarricenses. Así mismo les recordó a la dirigencia sindical que las puertas del Gobierno siguen abiertas al diálogo, instándolos a conversar y debatir acerca del tema personalmente condicionándolo a que depusieran el movimiento de huelga.
Por otra parte el jefe de Estado garantizó a la ciudadanía que resguardará el derecho ciudadano a recibir los servicios de salud, de educación, de agua y electricidad, además prevé la continuidad del suministro de combustibles, de los servicios portuarios y del tráfico en las terminales aéreas internacionales, entre otros aspectos.
“El Poder Ejecutivo ya tiene definidos el plan, las instrucciones y los objetivos que llevaremos adelante para enfrentar esta situación”, expresó, agregando que “procuraremos minimizar los impactos a la ciudadanía”.
