Cada año, más de 8 millones de toneladas de plástico terminan en los océanos. Esto causa estragos en la flora y fauna marina, la pesca y el turismo. Según algunas estimaciones, al ritmo que estamos desechando productos como botellas, bolsas y vasos de plástico de un solo uso, para 2050 los océanos contendrán más plásticos que peces y aproximadamente 99% de las aves marinas habrá ingerido plástico.
El ecosistema costero-marino es particularmente sensible a las consecuencias de los residuos plásticos, viéndose amenazada su biodiversidad.
Uruguay no escapa de esta realidad y está trabajando para detener este proceso. El 5 de junio la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley de “Uso Sustentable de Bolsas Plásticas”. Además, el Poder Ejecutivo envió al Parlamento la Ley de Residuos que busca generar un modelo de desarrollo sostenible mediante la prevención y reducción de los impactos negativos de la generación, manejo y todas las etapas de gestión de los residuos y el reconocimiento de sus posibilidades de generar valor y empleo. Y desde el 2009, el Mvotma lidera año a año el “Día Internacional de Limpieza de costas”.
Siguiendo esta línea se presentó, en Piriápolis el Plan de Acción de la Gestión de Basura Marítima. Esta experiencia que contribuirá con la conservación del ecosistema marino se enmarca en la campaña “Mares Limpios” de Naciones Unidas, a la que el Municipio de Piriápolis se unirá y asumirá una serie de compromisos para involucrar a la ciudadanía en los esfuerzos de reducir la contaminación por plásticos.
El Mvotma se unió a esta iniciativa en el 2016, cuyo objetivo es eliminar para 2022 las principales fuentes de basura marina. Durante el lanzamiento de este acuerdo el subsecretario del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma), Jorge Rucks reconoció el trabajo del Municipio de Piriápolis al ser el primero de todo el país en sumarse a la campaña “Mares limpios”.
El Plan de Acción de la Gestión de Basura Marítima busca involucrar a la sociedad civil, el Estado, el Gobierno y demás interesados en el desarrollo de actividades e implementación de acciones técnicas como alternativas de solución a la aparición y/o permanencia de la basura marina plástica. Para ello presenta un conjunto integral de herramientas para ayudar a incorporar componentes de gestión de residuos en diversas áreas: legislación gubernamental, aplicación, monitoreo e investigación, participación de la comunidad y sector empresarial.
Los resultados esperados son la reducción de los impactos que producen los desechos marinos en la economía, ecosistemas, el bienestar animal y la salud humana en el Municipio de Piriápolis y el departamento de Maldonado; y el aumento de la concienciación ciudadana sobre las fuentes de desechos marinos, su destino y los impactos.
El alcalde de Piriápolis Mario Invernizzi, reconoció la necesidad del involucramiento de la comunidad local y “la importancia de informar sobre esta problemática y sus posibles soluciones en los centros educativos”.
LJP