Ante la ola de delincuencia que azota a Uruguay, una concejal (edil) de un partido político de ese país sudamericano, Adriana Ávila, planteó en la Junta Departamental del departamento de Durazno que se implanten microchips de seguridad en lugar de tobilleras a los acusados de violencia doméstica, puesto que el ministro del Interior uruguayo Eduardo Bonomi, señaló que se están empleando 600 policías como custodias en casos de violencia doméstica por la falta de tobilleras y que esa cantidad de efectivos no pueden estar en la lucha diaria contra la delincuencia.
Según informa el diario Durazno Digital, la concejal dijo que “El gobierno está gastando en microchips para perros ¿por qué no gastamos en microchips, se los implantamos a los humanos, a los infractores, a los violadores y los tenemos monitoreados y controlados y sabemos lo que hacen?”.
Expresó que “¿Si las tobilleras no están funcionando por qué no implantamos microchips de seguridad a todos los delincuentes y reincidentes? ¿No sería una buena forma de tener controlada la situación? ¿No podría esto darle más seguridad al sistema?”, preguntó la edila.
Ávila consideró que el gobierno del izquierdista Frente Amplio se encuentra “perdido”, mientras las cifras de delitos como homicidios y rapiñas siguen creciendo. “Hay 207 homicidios en lo que va del año y las rapiñas aumentaron 50% en contra de lo que se pensaba. Ninguna de las medidas propuestas por el gobierno ha hecho disminuir los delitos”, aseveró.
Los delincuentes están ganando y el gobierno no hace nada. Se intensifican las protestas en todo el país pidiendo seguridad y cualquier idea que aporte algo sirve para contener la ola de violencia.
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