
El Consejo de Seguridad de Panamá encabezado por el Presidente de este país, Juan Carlos Varela, el ministro de Seguridad, Alexis Bethancourt y directores de estamentos de seguridad sostuvieron un encuentro para analizar los recientes hechos de violencia ocurridos en el país producidos por grupos de narcotraficantes y que han alarmado a la población.
En esta línea se especificó que los sucesos acaecidos en las localidades de San Miguel, Chilibre y Punta Burica en los últimos días han ocasionado la pérdida de vidas humanas y personas heridas, por lo que existe la necesidad de redoblar los esfuerzos para frenar a estos grupos que operan fuera de la ley.
Ante esto las autoridades competentes explicaron que Panamá lleva una lucha frontal contra el narcotráfico, así lo demuestran las recientes incautaciones y las diferentes operaciones contra cabecillas del narcotráfico, no obstante reconoció que existen focos organizados de narcotraficantes y del crimen organizado que operan en el país y amenazan con expandirse al resto de la región.
“Desde hace más de un año se ha advertido al país y a los países de la región el impacto que puede tener el aumento significativo de los cultivos de hectáreas de drogas sembrados en Colombia, y el remanente existente de la disidencia de miembros de las FARC que no se han acogido al proceso de paz, y según datos de inteligencia suman más de 800 miembros, lo que ha hecho que la producción se haya triplicado”, detalla un comunicado de prensa.
En este sentido especificó que las actividades a la distribución de estas sustancias ilícitas se han tornado más peligrosas por quienes se dedican a este negocio ilícito debido a que son sujetos disidentes de los grupos armados irregulares de Colombia. Esta situación ha generado el desarrollo de bandas locales que sumadas a los carteles de drogas internacionales, tiene la responsabilidad directa de más de 70% de los homicidios que ocurren en el país.
Bajo este contexto las autoridades reafirman su compromiso con la seguridad del país garantizando que se han iniciado operaciones masivas en las islas de Las Perlas, Darién, Costas de Colón y el Pacífico para frenar este problema, de igual manera se integran grupos especiales para apoyar con la judicialización de las diferentes bandas criminales que se dedican al narcotráfico a su nivel más alto, como se ha hecho en los últimos años.












