Por su parte la canciller venezolana contó a los medios algo que nadie vio: “”Somos presidente del Mercosur y tenemos pleno derecho de estar en esta reunión”, dijo, y mencionó que frente al piquete antimotín “lo primero que hice fue levantar mi manos y decir: ‘Soy la canciller de Venezuela’. En eso el policía me golpeó a lo cual yo le reclamé: ‘no me golpees’, pero detrás de mí también golpearon a toda mi comitiva, al vicecanciller de Bolivia. Es un caso bochornoso, violatoria de todas las convenciones internacionales y violatoria de la forma diplomática”, denunció.
Durante el resto del día, Delcy Rodríguez siguió como si nada con la agenda en Buenos Aires. de haber tenido la grave lesión que denuncia la habrían intervenido de urgencia.
Este jueves viajó a Montevideo y con su mejor sonrisa mostraba su brazo en cabestrillo, por la presunta agresión que ha quedado en claro no fue tal. La imagen que publicó Telenoche 4 de Uruguay la muestra riendo con el “toque” teatral de la inexistente agresión.
En Montevideo, sin ninguna muestra de dolor, se reunió con distintas autoridades y dialogó con los medios de comunicación.
Solo le servía el escándalo, nada más que eso y lo logró, demostrando que como actriz de reparto podría actuar en una comedia de cuarta categoría, pero que como diplomática es un verdadero fracaso.
Las pruebas de la inexistente agresión
En el video oficial de la embajada de Venezuela en Buenos Aires, se aprecia a la canciller discutiendo y moviendo su brazo derecho donde presuntamente recibió la agresión previa que nadie vio, ni tampoco filmó o fotografió.