El gobierno de Costa Rica destacó las acciones emprendidas por el Ejecutivo en materia de Derechos Humanos y de atención humanitaria, asegurando que estas han permitido consolidar la vocación del país en esta materia.
En esta línea el gobierno argumentó en un comunicado de prensa que durante el 2016 se reactivó la técnica de Fertilización In Vitro, prohibida en el país desde hace 16 años, lo que condujo a que cientos de parejas con problemas de fertilidad que no pueden tener hijos de forma natural puedan tener la esperanza y posibilidad de tener un recién nacido.
Por otra parte las autoridades presentaron un operativo de atención y respeto de los derechos humanos de la población migrante cubana, que a finales del 2015, quedaron varados -tras la desarticulación por parte de la policía costarricense de bandas internacionales de tráfico de personas- pero que no pudieron continuar su ruta hacia Estados Unidos ante la negativa de Nicaragua de permitirles pasar por su frontera.
Ante esto y gracias a las gestiones diplomáticas encabezadas por el Presidente de la República Luis Guillermo Solís Rivera y el Canciller Manuel González, se logró que 5.500 migrantes cubanos continuar con su camino para alcanzar el sueño americano.
Casi de inmediato, otro flujo con personas migrante, en condición irregular, tanto haitianos como extracontinentales arribó a Costa Rica y aunque el Gobierno no les prometió un traslado como a los isleños, sí les ha garantizada la protección de sus derechos humanos y dignidad.
De la misma forma se obtuvo la aprobación legislativa de la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, además de lograr avances sustanciales para disminuir en al menos un 20% el hacinamiento en los centros penitenciarios para el 2018, el máximo aceptable según pautas internacionales y recomendaciones de agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).