
La exmandataria que al cesar en su cargo exigió tener más de 100 guardaespaldas, algo no previsto en la normativa vigente ya que los gobernantes salientes tienen derecho a 30 efectivos destinados a su custodia permanente, pero Kirchner no está conforme y cree que aún sigue en el poder
Cristina Kirchner no viaja a Brasil en misión oficial, va porque quiere y ella misma lo explica en su cuenta de Facebook: “Mañana viajo a San Pablo, Brasil, invitada por la Fundación Perseu Abramo del Partido de los Trabajadores (PT) para dar inicio junto a Dilma Roussef, de la conferencia “La lucha política en América Latina hoy”. Antes nos reuniremos con Ignacio Lula Da Silva”.
Luego la expresidenta señala: “La misma “negligencia” se cometió cuando viajamos a Ecuador… Allí, el Gobierno de Correa garantizó la seguridad de la custodia y mía. Mañana no viajo al Ecuador de Rafael Correa, sino al Brasil de Temer…
Será responsabilidad del Gobierno Nacional, cualquier daño o situación que pueda sufrir el personal de custodia o mi persona…”
En realidad lo que va a hacer Cristina Kirchner es entrometerse en asuntos internos de Brasil, va en plan de provocación al gobierno de Michel Temer.
No queda en claro en sus declaraciones si pretende llevar armas de fuego para generar un conflicto o seguir agitando las aguas de la confrontación.









