El coche que conducía el embajador fue encontrado quemado en la mañana del jueves (29), bajo un viaducto del Arco Metropolitano, en Nova Iguaçu. En el interior, había un cuerpo carbonizado que se confirmó era del diplomático griego.
Según el delegado, Amiridis murió en su casa en Nova Iguaçu, a manos del policía militar Sergio Gomes Moreira Filho, amante de la esposa del embajador. Luego del crimen el cuerpo fue envuelto en una alfombra y llevado hasta el automóvil del diplomático con la ayuda del primo del policía, Eduardo Moreira de Melo.
El policía militar aparece en las grabaciones de cámaras de seguridad del condominio donde vivía el embajador con su mujer, la instigadora del asesinato. El amante y su primo confesaron su participación en el crimen, pero la esposa del diplomático niega que tener algo que ver con el homicidio. Sin embargo, de acuerdo con el delegado Pontes, la mujer es la autora intelectual del asesinato.
Entre los motivos del crimen, podría estar la apropiación de bienes e incluso los seguros de vida del embajador, pero esto todavía está siendo investigado.
El jefe de la División de Homicidios de Río de Janeiro, delegar Rivaldo Barbosa, se disculpó con el pueblo griego por el delito, clasificado por él como “cruel, cobarde y poco razonable”.
El diplomático había desaparecido desde el pasado lunes (26). Amiridis vivió en Brasilia y vacacionaba en Río, donde fue cónsul general 2001-2004 y en 2016 había vuelto como embajador de Grecia.