En la carta de Almagro a Maduro sólo se explicita lo que todo el mundo sabe y pocos se atreven a decir sobre el tiránico presidente del régimen chavista. Una verdad que les duele a los socios ideológicos de la región.
Interpretando algo que no dice Almagro en su misiva, el inefable Evo señala: “El Secretario Gral. Luis Almagro no puede convertir la OEA en instrumento de intervención de EEUU. Es un acto de traición a la Patria Grande”, escribió en su cuenta de Twitter: @evoespueblo.
El hombre que acusa a los inocentes pollos de ser causantes de la homosexualidad, arremete con su acostumbrada mala fe (o ignorancia) contra una carta que solamente pide democracia para un pueblo acosado por un ‘dictadorzuelo’ sin respeto por los derechos humanos.
El secretario general de la OEA no pide intervenir en Venezuela, el propio Almagro lo dice en su enérgica carta: “Que nadie cometa el desatino de dar un golpe de Estado en tu contra, pero que tú tampoco lo des. Es tu deber. Tú tienes un imperativo de decencia pública de hacer el referéndum revocatorio en este 2016, porque cuando la política esta polarizada la decisión debe volver al pueblo, eso es lo que tu Constitución dice. Negar la consulta al pueblo, negarle la posibilidad de decidir, te transforma en un dictadorzuelo más, como los tantos que ha tenido el continente”.
Si exigirle a un tirano que rectifique y devuelva al pueblo lo que es del pueblo, es una locura, habría que tomar en cuenta lo que dice el expresidente de Uruguay, José (Pepe) Mujica cuando asegura que Maduro, a las vista de sus actos, “está loco como una cabra”, una apreciación que parece ahora incluir a Evo Morales, por las interpretaciones erradas y demenciales que da a los hechos reales.
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