
“Mostramos aquí el verdadero golpe, promovido por el gobierno de PT, iniciado por el presidente Lula y continuado por Dilma Rousseff”, dijo el líder del partido Demócratas”, quien afirmó que el mayor golpe son los 11 millones de desempleados en Brasil.
Para Caiado, el gobierno mintió durante la campaña electoral del 2014. Mencionó el aumento de las tarifas de electricidad y de la gasolina, además del cierre de 303 mil empresas y de la retracción del Producto Interno Bruto (PIB) en 2015 y 2016.
Para justificar su posición, el senador criticó la reducción de inversiones en programas sociales y resaltó que Petrobras pasó de ser la cuarta empresa más grande del mundo para ocupar el puesto de la mayor deudora. “Estamos interrumpiendo un ciclo dañino”, dijo.
Por otro lado, parlamentarios oficialistas ya arman una agenda de oposición al gobierno interino del vicepresidente Michel Temer. Aseguran que presentarán más recursos ante el Supremo Tribunal Federal (STF), pese a que el ministro Teori Zavascki haya denegado la solicitud de la defensa de Rousseff para suspender la instauración del proceso de impeachment en el Senado.
“Vamos a deliberar y apelar nuevamente al STF porque creemos que hay espacio para revertir esa situación”, dijo el senador Lindberg Farias, aduciendo “desvíos de finalidad” por parte del expresidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha.
“Ahora nos preparamos para hacer una oposición durísima en los próximos días, pues no reconocemos a Temer como presidente. Se trata de un gobierno derivado de un golpe, y no vamos a aceptar que quite derechos a los trabajadores con ese paquete de medidas que viene para acabar con el legado de Lula, Ulysses Guimarães y Getúlio Vargas”, declaró el senador.
Según el senador Humberto Costa, de aprobarse el apartamiento de Rousseff, al PT no le quedará otro camino que la oposición. “Será una oposición muy firme, que denunciará permanentemente el golpe que se está perpetrando contra la democracia en Brasil”, dijo. Aseguró que dicha oposición “no repetirá lo que hizo la actual oposición al apostar por el cuanto peor mejor”.









