
“Si todo va bien, y el Tribunal Supremo aprueba (que sea ministro) el jueves estaré asumiendo en la Casa Civil del gobierno. Y voy a decir por qué acepté, después de mucho tiempo. Es porque estoy convencido, creo que, como yo creo en Dios que este país tiene que cambiar, tiene que dar la vuelta, cambiar la economía, generar empleo e ingresos para estas personas”, dijo.
Para determinar si Lula- que está siendo juzgado por presuntos delitos de corrupción puede asumir como jefe de la Casa Civil del gobierno de Brasil- el proceso debe ser diligenciado por el magistrado del Tribunal Supremo, Gilmar Mendes, ponente de las órdenes judiciales en las que se suspendió la posesión de Lula como ministro.
El 18 de marzo pasado, el juez Gilmar Mendes, en decisión individual, suspendió la asunción de Lula como Jefe de Gobierno al frente de la Casa Civil. Ministro de la Corte Suprema asistió a una medida cautelar de la PPS y el PSDB. En su resolución, Mendes dijo que el nombramiento de Lula para el cargo de Ministro era con el objetivo de eliminar la competencia del juez federal Sergio Moro (responsable de las investigaciones de la lava Jato) para investigarlo.
En la apelación, el Fiscal General de la Unión (AGU) se defendió de las afirmaciones de Gilmar Mendes sobre la supuesta intención del Gobierno de nombrar a Lula para beneficiarse con el foro privilegiado.









