
Macri dijo que al Papa “Le comenté mi gran preocupación por unir a los argentinos, dejar atrás los rencores y trabajar en agenda común de futuro para resolver los problemas del país, especialmente la pobreza y el narcotráfico”, señaló el Presidente luego de la reunión que mantuvo esta mañana con el Papa en la Santa Sede. “Le dije que espero seguir trabajando junto a la Iglesia argentina en este tema, ir virando a un país de pobreza cero y por ese motivo fue muy importante haber coincidido en la importancia de estar juntos y unidos”, añadió.
“Todo fue muy cordial y estoy contento de habernos encontrado nuevamente. Años atrás parecía imposible imaginar este encuentro cuando él era Obispo de Buenos Aires y yo Jefe de Gobierno”, señaló Macri sobre su primer encuentro con Su Santidad como presidente de los argentinos.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede informa que “durante el transcurso de los cordiales coloquios, que manifiestan el buen estado de las relaciones bilaterales entre la Santa Sede y la Republica Argentina, han sido abordados temas de mutuo interés, tales como la ayuda al desarrollo integral, el respeto a los derechos humanos, la lucha a la pobreza y al narcotráfico, la justicia, la paz y la reconciliación social. En tal contexto, ha sido subrayada la positiva contribución, sobre todo en el ámbito de la promoción humana y de la formación a las nuevas generaciones, ofrecida por el Episcopado y por las instituciones católicas en la sociedad argentina, de manera particular en la coyuntura económica actual. Por último, se hizo referencia a algunos temas de mayor relevancia e interés en el ámbito regional y mundial”.
La actitud del Papa
Lo que llama la atención sobre el pontífice, es que haya recibido en el Vaticano a la exmandataria de su país, Cristina Kirchner, en seis oportunidades entre halagos y sonrisas, a pesar del desprecio y el maltrato de la ex Jefa de Estado hacía Bergoglio cuando era Cardenal en Argentina, verificado en las largas esperas del hoy Papa en la antesala de la Casa Rosada, para luego comunicarle que no podía recibirlo, en una clara demostración de falta de respeto.
A pesar de la situación de intolerancia y corrupción del kirchnerismo, el Papa no cuestionó-al menos públicamente- las decisiones del gobierno kirchnerista e incluso ha recibido entre sonrisas a personajes siniestros del gobierno de Cristina Kirchner, como el recientemente procesado Guillermo Moreno, e incluso a pedido expresó de la expreidenta, Bergoglio llamó para felicitarla por su cumpleaños, a la abuela del dirigente del grupo ultra radical ‘La Cámpora’.
Francisco también ha recibido en audiencia privada a la dirigente Milagro Sala, la protegida de los Kirchner que se cargó la economía de la provincia de Jujuy y que se ha enriquecido en forma personal, desviando en su beneficio-según la Justicia- los recursos de millones de pesos que debían ser entregados a obras sociales. hechos ya comprobados por las denuncias de las propias víctimas, gente pobre de la la provincia jujeña. La dirigente está siendo juzgada por sus desmanes.
Pero al Papa parece importarle poco el sufrimiento que provocó Milagro Sala a sus conciudadanos y como aliento y respaldo le ha enviado un rosario de regalo.
El pontífice seguramente debe estar mal informado, ya que cuestiona los más de dos mil despidos en oficinas públicas que realizó el nuevo gobierno argentino, al descubrir que eran empleos dados por el kirchnerismo como favor político y que no iban a trabajar. Sólo pasaban a fin de mes para cobrar el salario.









