También deberá comparecer el contratista José Pinheiro Adelmário y el ingeniero Igor Puentes, vinculado a la empresa constructora de la OEA, el responsable de la empresa. La propiedad, que se encuentra en Guarujá, en la costa, es el objetivo de las investigaciones de la etapa 22 del operativo Autolavado de Petrobras, Operación Triple X, que estalló el día 27.
La sospecha del Ministerio Público Federal (MPF) es que los propietarios de apartamentos del condominio han utilizado el nombre de terceros para ocultar activos. Los investigadores llegaron a esta conclusión después de recibir la inscripción de los bienes inmuebles inscritos en el Registro Civil de la ciudad.
Lula rechaza intentos de involucrarlo en la Operación Autolavado
El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva publicó en su cuenta de Facebook una nota repudiando el intento de involucrarlo en actos ilícitos investigados por la Operación Autolavado.
Reportajes difundidos por la prensa indican que la nueva fase de la operación, que se conoció este 27 de enero por la Policía Federal, estaría acercándose al ex presidente. La etapa investiga un presunto lavado de dinero con la compra de bienes raíces en Guarujá, ciudad costera del estado de São Paulo.
Lula dijo que, en los últimos años, ningún otro líder brasileño tuvo la vida privada y partidaria tan investigada, y que nunca se ha encontrado acusación válida en contra de él. Según el post, Lula “ni siquiera fue mencionado en la decisión del juez Sergio Moro y rechaza cualquier intento de involucrar a su nombre en actos ilícitos investigados por la llamada Operación Autolavado”.
La nota añade que “Lula fue arrestado, sí, pero por la dictadura, porque luchaba por la democracia en Brasil y por los derechos de los trabajadores”. “No será investigando un apartamento, que ni siquiera le pertenece, que se encontrará una mácula en su vida.”
“Lula nunca ha ocultado que su familia compró, en cuotas, por medio de Bancoop, un apartamento donde hoy está el Edificio Solaris. Eso fue declarado a las autoridades fiscales y es público desde 2006. En otras palabras: pagó, no recibió dinero por la propiedad. Para tener el apartamento, de hecho y de derecho, sería necesario pagar la diferencia entre el valor de la cuota y el valor de la propiedad, con los cambios y adiciones al proyecto original. La familia del expresidente no ejerció ese derecho. Así que Lula no ocultó el patrimonio, no recibió favores, no hizo nada ilegal. Y seguirá luchando en defensa de Brasil, del Estado de Derecho y de la democracia”, dice el comunicado.
Agencia Brasil