Dolor por la derrota: Cristina Kirchner no permite diálogos previos para la transición

La presidenta argentina, Cristina Kirchner, que vive las últimas horas al frente del gobierno de su país, ha demostrado que la derrota en los comicios que ha ganado el opositor Mauricio Macri, ha hecho mella en la forma en que debe encararse el proceso de transición democrático, ya que en el encuentro con el mandatario electo, en la residencia presidencial de Olivos, lo recibió apenas casi 40 minutos sin entrar en los detalles del cambio de mando y no le permitió a Macri utilizar la sala de periodistas y este tuvo que dialogar con los medios en la puerta de la casa presidencial.
También ordenó que los ministerios serán entregados a los nuevos ministros, el mismo día del cambio de mando, el 10 de diciembre, sin que previamente se reúnan para conocer detalles del estado de los mismos.
El designado Jefe de Gabinete de Macri Marcos Peña dijo sobre la fallida reunión entre el presidente electo y Cristina Kirchner, que “hubiéramos preferido una transición más normal como es habitual en los países cuando el presidente electo es invitado por el presidente a la casa de Gobierno, se hace un acto público y a partir de ahí se hace un proceso de transición”, reconoció el dirigente de Cambiemos.
Este miércoles Kirchner volvió a utilizar la cadena nacional para enumerar los presuntos logros de su gobierno y aseguró con visifle dolor por la derrota y contrariamente a su actitud nada conciliadora y entreverando los tiempos ya que Macri nada tuvo que ver con lo que ocurrió en épocas de proscripción, dijo “a los 40 millones de argentinos” que “se queden tranquilos” porque “no vamos a hacer las cosas que nos han hecho a nosotros”, dijo al recordar las “persecuciones, negaciones y proscripciones” sufridas por el peronismo en épocas pasadas.