Maduro ordena vigilar a fiscales y jueces para que no denuncien y escapen del país

El régimen chavista en medio del escándalo que ha generado la declaración del fiscal titular de la fiscalía 41 de Venezuela, Franklin Nieves, que reveló públicamente las presiones y el acoso del régimen chavista para que con pruebas falsas condenara al político opositor Leopoldo López, ya se habría ordenado como primera medida, una vigilancia a los fiscales y jueces que tienen a su cargo los casos de acusaciones a políticos y actores sociales opositores, para evitar una posible catarata de deserciones entre los fiscales acusadores.
El fiscal Nieves ha escapado de Venezuela con su familia luego de grabar un video donde explica como se fraguaron las pruebas en contra de Leopoldo López: “Soy Franklin Nieves. Decidí salir de Venezuela por la presión que estaban ejerciendo el Ejecutivo nacional y mis superiores jerárquicos para que continuara defendiendo las pruebas falsas con las que se había condenado al ciudadano Leopoldo López”.
Mientras se realizan reuniones urgentes por la repercusión mundial de la denuncia del fiscal Nieves, el régimen ha presionado a los altos cargos del Ministerio Público y del Poder Judicial, para que actúen de inmediato y les hagan “entender” a sus funcionarios las represalias que sufrirían si deciden hablar sobre los casos en los que están trabajando, según ha informado a este medio una alta fuente venezolana.
Tanto la Fiscal general, Luisa Ortega Díaz, que tiene a su cargo a los fiscales y siempre aseguró que en Venezuela se respetaban las garantías del debido proceso y la presidenta del Tribunal Supremo, Gladys Gutiérrez que controla a la jueza Barreiros que condenó a López a más de 13 años de cárcel, quedan en entredicho y se anuncia que comenzarán a exigirles sus renuncias a sus cargos, porque han permitido la corrupción dentro de los organismos en los que ejercen la titularidad.
Como se daban las órdenes para presionar a fiscales y jueces
El gobierno de Maduro recibía instrucciones desde Cuba sobre la forma de presionar al obsecuente Ministerio Público a través de la ultrachavista fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, que trasmitía las órdenes de Maduro y Diosdado Cabello al director de Delitos Comunes del Ministerio Público, Nelson Mejías, que se encargaba intimidar a los fiscales para que fraguaran las pruebas en contra de los acusados. Ortega Díaz incluso,agregaba más ideas propias para preparar las pruebas falsas.
En el caso de Leopoldo López además del arrepentido fiscal Frankñin Nieves, actuaba su colega Narda Sanabria, que fiel al chavismo no tenía problemas de conciencia para mentir e inventar acusaciones falsas contra el líder opositor.
En forma similar actuaban desde el Tribunal Supremo de Justicia con la intimidación a los jueces.
Por otro lado se informa que varios fiscales y jueces quieren renunciar en Venezuela, pero han sido amenazados ellos y sus familias por parte del régimen.