
La juez Susana Barreiros de Venezuela, luego de escuchar la defensa que Leopoldo López hizo de su caso en la tarde de este jueves, solicitó a las partes regresar a sala a las 7:15pm para dictar Sentencia en la causa que involucra al líder opositor y a los estudiantes, pero pasadas las 8:35pm no aparecía, según informó el periódico La Patilla.
A través de una información confidencial de una alta fuente de Venezuela que por razones obvias no revelaremos, la juez Susana Barreiros, demoraba presentarse en la sala ya que consultó primero a miembros del Tribunal Supremo de Justicia, para saber que debía hacer ya que temía liberar a Leopoldo López y que ella terminara de la misma forma que la ex juez María Lourdes Afiuni, que por dictar una sentencia en forma libre e independiente, fue encarcelada y torturada por el régimen chavista por no acatar las órdenes del gobierno venezolano.
Según nuestra fuente calificada, desde el Gobierno en la noche de este jueves, volvieron a presionar a la Juez Barreiros y la aleccionaron de como debía fallar en el caso y condenar a Leopoldo López, omitiendo las pruebas a favor que habrían demostrado la inocencia del acusado.
Un ‘asesor’ de Nicolás Maduro le recordó sutilmente a Barreiros lo que le ocurrió a su antecesora en el cargo, la exmagistrada Afiuni por no acatar las órdenes del gobierno.
Por otro lado, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Gladys Gutiérrez nada hizo para evitar este atropello a la Justicia.
Con visible temor la obsecuente juez dio a conocer la sentencia y seguramente recordó las palabras de Leopoldo López que horas antes, valientemente le dijo en la cara en esa misma sala: “Si la sentencia es condenatoria Ud tendrá más miedo de leerla que yo de escucharla porque Ud sabe que soy inocente”.
La juez Susana Barreiros, dictó la sentencia de 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas de prisión para el coordinador de Voluntad Popular, Leopoldo López, Los estudiantes también fueron condenados pero recibieron la medida cautelar sustitutiva.
A pesar de las pruebas a favor de López, Barreiros no admitió ninguna prueba de la defensa y falló en contra y demostró que el Poder Judicial en Venezuela no es libre ni independiente.
Pero con esta decisión arbitraria, la juez Susana Barreiros, consiguió su propia libertad y no terminar en una cárcel por no obedecer al régimen, como le ocurrió a la valiente magistrada Afiuni.









