El gobierno español ha decidido constituir una Comisión Interministerial para articular un sistema de acogida a los refugiados en la UE que sea ordenado y ponga en común las capacidades de todas las administraciones españolas, porque se trata de una “política de Estado” que pretende no solo acoger, sino integrar y ofrecer un futuro a estas personas.
La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ha anunciado que para articular un sistema de acogida a los refugiados que suponga una verdadera integración, y, además, hacerlo de manera ordenada, el presidente del Gobierno ha decidido crear una Comisión Interministerial que presidirá la propia vicepresidenta y estará integrada por los departamentos implicados. La primera decisión que se ha tomado es pedir la convocatoria de la Conferencia Sectorial de Migraciones, que se reunirá, presumiblemente, la próxima semana.
El Ejecutivo español ha venido defendiendo desde hace tiempo que los movimientos migratorios constituyen “quizá uno de los grandes retos que tienen por delante la Unión Europea y el mundo en general”, por ello trabajará con “la mayor seriedad, responsabilidad y solidaridad posible” porque esa ha sido siempre su postura en materia de inmigración y de asilo.
Son problemas, ha resaltado la vicepresidenta, a los que hay que responder con “unidad”, “sensibilidad” y “capacidad de cooperación”, razón por la que España defiende en la Unión Europea que “tenemos que ser capaces de liderar una política única y común”, tanto en la inmigración de naturaleza laboral, como en el tratamiento del asilo y el refugio.