La decisión fue dictada en relación con la rendición de cuentas de la campaña por la reelección de la presidenta Dilma Rousseff. Aunque la rendición de cuentas haya sido aprobada por el pleno de la corte en diciembre del año pasado, el ministro ha pedido que se investiguen presuntos delitos.
Según Mendes, la decisión del TSE que aprobó las referidas cuentas no tomó en consideración las sospechas de donaciones ilegales a partidos bajo investigación en la Operación Autolavado.
“Cabe señalar que, aunque las cuentas de campaña de la candidata y del partido fueron juzgadas en diciembre de 2014, fue solo en el 2015, tras la profundización de las investigaciones por presuntas corruptelas en Petrobras, que se hicieron públicos los relatos sobre el uso de donaciones de campaña como subterfugio para pagar sobornos”, declaró el ministro.
En un comunicado, el ministro de la Secretaría de Comunicación Social, Edinho Silva dijo que “todas las contribuciones y gastos de la campaña de 2014 se presentaron al TSE, que después de rigurosa averiguación aprobó por unanimidad las cuentas”.
En un comunicado, el Partido de los Trabajadores afirmó que “todas las donaciones que recibió el partido se realizaron estrictamente dentro de los parámetros legales y fueron posteriormente declaradas a la Justicia Electoral”