Bárcena participó en una conferencia en la sede del Banco Centroamericano de Integración Económica en San José, donde se encuentra en una visita de trabajo de dos días.
Durante su intervención, la secretaria ejecutiva indicó que el déficit fiscal de Costa Rica tiene raíces estructurales y se originó debido a la eliminación de aranceles al comercio exterior, a los incentivos fiscales y a asignaciones de gasto decididas por el Congreso que no iban acompañadas de los ingresos correspondientes.
“Costa Rica necesita una reforma fiscal para sostener lo que ha logrado”, recalcó Bárcena.
Recordó que América Latina y el Caribe es una región que recauda poco y mal, con niveles tributarios de alrededor de 20%, frente a tasas superiores a 30% en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Añadió que esto se suma al problema de la evasión fiscal y apuntó que los flujos ilícitos que salen de la región ascienden a 150.000 millones de dólares, cifra que duplica los ingresos por remesas –unos 63.000 millones de dólares–, y que supera en quince veces la ayuda oficial al desarrollo: unos 10.000 millones de dólares.