El mandatario ruso afirmó que es extraño que las detenciones de los funcionarios de la FIFA se produjeran a petición de la justicia estadounidense, informa el sitio web del Kremlin y la cadena rusa RT.
“Podemos suponer que algunos de [los funcionarios] realmente violaron algunas normas o leyes, no lo sé, pero ciertamente EE.UU. no tiene nada que ver con eso. Estos funcionarios no son ciudadanos estadounidenses. Y si algún acontecimiento sucedió, no fue en el territorio de EE.UU. (…) Es otro intento evidente de extender su jurisdicción a otros países”, puntualizó el mandatario.
El presidente Putin no toma en cuenta que varios de esos hechos de presunta corrupción, se producen desde 1991 y también se realizaron en territorio de los Estados Unidos durante la copa del mundo de 1994, que es parte de la investigación.
Además, uno de los principales acusados, el vicepresidente ejecutivo de la FIFA, Eugenio Figueredo, tiene fijada su residencia en EEUU y ahora se comprobó que lo hizo apelando a un fraude.
Varias de las transacciones se realizaron en territorio norteamericano y una empresa acusada, Traffic está instalada en ese país.
También Chuck Blazer es ciudadano norteamericano y fue presidente de la CONCAFAF y para salvarse de la pena a cumplir en EEUU, por una millonaria evasión fiscal, colaboró con las autoridades de su país revelando los hechos de corrupción en la FIFA.
Putin defiende a Blatter
“Como sabemos, para el viernes estaba prevista la celebración de las elecciones presidenciales de la FIFA, y Blatter tiene todas las posibilidades de ser reelegido. Somos conscientes de la presión que se ejerció sobre él para prohibir la Copa Mundial de la FIFA 2018 en Rusia”, afirmó el jefe de Estado ruso.
El mandatario ruso afirmó que “no le cabe duda de que se trata de un claro intento de impedir la reelección de Blatter al frente de la FIFA, lo que es una violación flagrante de los principios de las organizaciones internacionales”.









