Rajoy ha subrayado que todas esas reformas “están dando sus frutos” porque, en estos momentos, tanto Grecia como España son “dos de los países con la mayor tasa de crecimiento de la zona euro”. Por eso, el presidente se ha mostrado convencido de que “si no bajamos la guardia”, si continuamos con las mismas políticas y con las reformas, “estaremos en condiciones de situar nuestras economías en la senda de un crecimiento sostenido y estable y garantizaremos un futuro de prosperidad y de bienestar”.
El presidente ha insistido en la defensa de estas políticas y no ha querido hablar de otras formaciones. Sí ha añadido: “Prometer cosas que son imposibles es algo que no tiene ningún sentido y genera, además, una enorme frustración”.
En la salida de la crisis, necesitamos estabilidad, certidumbre y confianza
El jefe del Ejecutivo ha insistido: “Ahora que finalmente estamos saliendo de esta crisis, necesitamos estabilidad, no inestabilidad. Necesitamos certidumbre y confianza, no incertidumbre y desconfianza”.
Según ha explicado, “nuestro futuro se encuentra en Europa”, si bien el euro “no es un proyecto a la carta”. Pertenecer a la moneda única, ha dicho, “requiere compromisos constructivos y no unilateralismo y confrontación”.
Rajoy se ha mostrado rotundo al afirmar que una Europa fuerte y estable “necesita estados miembros estables, con gobiernos elegidos democráticamente que respeten los compromisos adquiridos y que contribuyan a la unidad y recuperación de nuestro continente”.