
La rebaja establecida por el Plenario de Diputados es de más de ¢2.000 millones; esto pese a que el Ministerio de Seguridad Pública ya había reducido el rubro en más de ¢4.000 millones.
“El objetivo es continuar creciendo y estos recortes nos limitan mucho, la idea es no tener que tomar medidas urgentes”, adviertió Marín. La viceministra anunció que, aparte de la no contratación de nuevos policías por la directriz presidencial, la merma en el presupuesto implica la rescisión de contratos en edificaciones, alquileres y mantenimiento de equipo de cómputo, así como de vehículos y embarcaciones policiales.
Además, no se podría cancelar la totalidad de la póliza de seguros contra incendio, vehículos, riesgos de trabajo y muerte de funcionarios. Mantenimiento de edificios, terrenos, equipo, mobiliario, servicios básicos, servicios general y compra de materiales de construcción están implicados en la afectación al presupuesto de la institución.
La viceministra comentó que la reducción afecta en su gran mayoría al área administrativa, la cual no ha crecido como la policía; pero que realiza un binomio para el buen desempeño a favor de la seguridad del país.
En el principio la institución presentó al Ministerio de Hacienda un presupuesto por más de ¢241.000 millones; pero debido a la solicitud del Plenario se redujo aproximadamente a ¢237 mil millones. A este monto, la Asamblea Legislativa le realizó una reducción más de ¢2.000 millones.
El viceministro Gustavo Mata, añadió que le hacen un llamado a los diputados para que no afecten la seguridad del país. “Debemos invertir en prevención; en hacer que dejen pasar delitos; porque por más represión que exista, no es suficiente; la prevención debe ser la prioridad”.
Mata también recordó que esta materia es delicada. “Con la seguridad no se debe jugar, y menos con la seguridad de las personas”, dijo el jerarca.









