Banco de España dice que inmigración de españoles tendrá efecto sobre el crecimiento de la economía

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Banco de España (Foto: ICNDiario)
Banco de España (Foto: ICNDiario)
En un informe conocido este miércoles, el Banco de España, señala que el comienzo de la crisis en 2008 frenó la tendencia creciente de los flujos de inmigración a España, aunque se han mantenido en unos niveles aún relativamente elevados (en torno a 500.000 personas en 2009, hasta reducirse hasta las 342.000 entradas según los últimos datos disponibles referidos a 2013). La Estadística de Migraciones presenta un perfil similar desde el inicio de la crisis, aunque muestra un nivel de entradas de inmigrantes algo inferior: 290.000 entradas en 2013. Por nacionalidades, se produjo un descenso apreciable del porcentaje de europeos en la primera fase de la crisis (2008-2009), aunque posteriormente han recuperado el peso relativo que se observaba previamente.
El informe señala que los flujos migratorios de salida de España se mantuvieron en niveles muy moderados en la primera mitad de la década de los años 2000, para comenzar a mostrar un aumento a partir de 2006, hasta superar las 300.000 personas en 2009 y situarse sobre las 450.000 personas en 2013, según la Estadística de Variaciones Residenciales. La Estadística de Migraciones, que complementa los datos de la anterior con fuentes adicionales de información, muestra un perfil similar desde el inicio de la crisis, aunque con un nivel superior en todos los años, hasta alcanzar las 547.890 personas en 2013, el 1,2 % de la población total a 1 de enero de 2014. Este aumento de las salidas hacia el extranjero, unido a la desaceleración observada en las entradas, ha provocado un saldo migratorio negativo desde el año 2010, que se elevó hasta las 256.849 personas en 2013, de acuerdo con las cifras de la Estadística de Migraciones. El notable aumento de los flujos de salida de población se concentra, fundamentalmente, en la población extranjera. De hecho, alrededor del 85 % de los flujos de emigración está compuesto por extranjeros. En todo caso, a pesar de su aún reducida cuantía, las salidas de población española nacida en España se ha más que doblado a lo largo de la crisis, desde unas 25.500 personas en 2008 hasta las 52.160 estimadas para 2013.
La mayoría de los emigrantes de nacionalidad extranjera que salen de España son europeos y sudamericanos. En cuanto a los nacidos en España, la mayor parte de los que emigran lo hacen a países europeos, seguidos de países americanos.
El documento del Banco de España, expresa que: “En lo que respecta tanto al tamaño como a la composición de la población activa por nivel educativo, el cambio de signo del saldo migratorio puede tener implicaciones relevantes.
En concreto, la persistencia de flujos importantes de emigración podría llegar a tener un efecto significativo sobre el crecimiento potencial de la economía española, lo que enfatiza la necesidad de maximizar los esfuerzos encaminados a reducir la elevada tasa de paro, así como a propiciar un marco laboral que facilite el regreso futuro de las personas que han emigrado durante la crisis.