
En este segundo debate de política general de la legislatura, Mas ha explicado, en un discurso de poco más de una hora y media, que su “intención real” es agotar la legislatura, pero “para que pueda ser así debe votar el 9 de noviembre y con plenas garantías democráticas”. Asimismo, advirtió que “el tramo final de 2014 marcará un antes y un después en la historia de Cataluña”, ha destacado la importancia del consenso en todo el proceso soberanista y ha pedido al gobierno español que cambie de actitud con respecto a esta cuestión, ya que votar “sería bueno para Cataluña, para España y para Europa”.
“Cataluña y el Estado van por vías diferentes y en direcciones diferentes. En el fondo, no hay choque de trenes. Hay alejamiento de trenes”, aseguró. En este punto ha explicado que “Cataluña no se ha cansado de España. Se ha cansado del Estado español”.
También se refirió a la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el estatuto, que, afirmó, “expulsó la mayoría de la sociedad catalana del pacto y del consenso constitucional” y deja este pacto “en vía muerta”, y ha destacado la fuerza de las manifestaciones de las tres últimas jornadas, en las que los catalanes, dijo, ya no están “cabreados”, sino “ilusionados”.









