Las declaraciones de la Fiscal General de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, sobre el respeto a los derechos humanos en Venezuela, parecen salidas de una mala historia de ficción, donde la burla a la inteligencia de los ciudadanos venezolanos y al mundo no es de ninguna manera aceptable.
Ortega Díaz ha llegado a decir- como la cosa más natural del planeta- que “La política del estado venezolano, la directriz del estado venezolano es respetar los derechos humanos y nuestros funcionarios policiales, los funcionarios de la Fuerza Armada Nacional han sido preparados para el abordaje de cualquier situación, siempre respetando los derechos humanos”.
Sin duda que esto es una afrenta a los miles y miles de ciudadanos que padecen a diario las arbitrariedades de un régimen que viola sistematicamente los derechos humanos de quienes no profesan sus ideas. Las pruebas están a la vista, no hay como ocultarlas.
Pero como si fuera poco, la fiscal agrega: “Nunca antes en la historia de este país tuvo tanta importancia, tanta pertinencia, tanto valor en los derechos humanos como lo tiene actualmente”, manifestó.
Como burla a la inteligencia, la funcionaria expresa algo que sólo ella puede creer: “Estamos dispuesto a construir un equipo permanente que va a desarrollar toda la tarea de formación de los derechos humanos, iremos a las escuelas, a los colectivos y a los consejos comunales”, puntualizó.
En fin; lo del título de este artículo, primero que nada se debe respetar a la gente y dejar de decir cosas que sólo el gobierno y sus acólitos creen, pero que el resto de los ciudadanos sufre al no tener la más mínima garatía de que se respeten sus derechos humanos.