El terreno baldío a casi 6 kilómetros del estadio Maracaná, donde se jugará el mundial de fútbol, había sido ocupado por aproximadamente unas 6.000 familias.
La Unidad de Pacificación de la Policía (UPP) debió emplear medios de disuasión para apaciguar a los habitentes de la favela que provocaron incendios para evitar la acción policial. Se informa al menos hay algunos heridos y otros afectados por la inhalación de humo.
Por otro lado se ha informado que las fuerzas de seguridad del Estado trabajan en la planificación operativa para la Copa del Mundo de 2014 con el Comité Especial de la Seguridad del Estado para Grandes Eventos (CESEGE)
El despliegue de la Policía Militar será un 70% mayor de lo previsto para la Copa Confederaciones de la seguridad de la zona exterior del Estadio Mario Filho, Maracaná.
El Centro de Asistencia de Policía Civil contará para los turistas extranjeros, en las estaciones de policía en las áreas de interés para el evento, con 156 funcionarios competentes en lenguas extranjeras.
El delegado Alexandre Braga, la Policía Civil de Río de Janeiro (PCERJ), y el Coronel Ezequiel Oliveira Mendonça, de la Policía Militar de Río de Janeiro (PMERJ) son los coordinadores operativos. El delegado Tarcisio Andreas Jansen y el Coronel Marcelo Rocha son los coordinadores de las instituciones de seguridad estratégicos para la Copa del Mundo de 2014.