
El Gobierno de México presentó las directrices de las tres estrategias transversales para el Ejecutivo, dentro del marco de su gestión en el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018, donde aboga por realizar cambios estructurales en las instituciones del Estado a fin de garantizar a los ciudadanos del país una mejor gestión de los recursos humanos y materiales con que cuenta con miras a impulsar el desarrollo.
En este sentido se publican en el Diario Oficial de la Federación DOF tres decretos por los que se aprueban los programas especiales correspondientes a dichas estrategias, destacando el Programa para Democratizar la Productividad que tiene por finalidad definir las estrategias prioritarias para incrementar la formalidad; generar mayor financiamiento a actividades productivas y elevar la inversión en capital humano.
Asimismo aboga fortalecer el ambiente de negocios; impulsar un desarrollo regional equilibrado; y orientar el diseño de las políticas públicas y de los programas presupuestales hacia el incremento de la productividad.
De la misma forma el Programa para un Gobierno Cercano y Moderno persigue como objetivo central hacer más eficaz la gestión de los trámites burocráticos públicos y estrechar la relación con el ciudadano, de manera de instaurar herramientas digitales e innovación que permitan dar impulso a las pequeñas y medianas empresas, asistencia expedita contra los delitos o acercar a los niños a participar en la era del conocimiento.
Por último el Programa Nacional para la Igualdad de Oportunidades y No Discriminación contra las Mujeres (Proigualdad), establece una serie de mecanismos para sancionar la violencia de género, e incorpora la perspectiva de género en la Cruzada Nacional contra el Hambre; promueve acciones afirmativas en todos los niveles educativos y busca facilitar la actividad empresarial de las mujeres, entre otros.









