
En este punto, Sánchez-Camacho ha querido diferenciar el caso Bárcenas del caso Palau: “En un caso tenemos un presunto delincuente que está en la cárcel y lanza acusaciones contra un presidente del Gobierno y en el caso Palau estamos hablando de un juez, que no es un presunto corrupto, que concluye una instrucción diciendo que CDC se ha financiado ilegalmente“. “A sus socios de ERC les convendría mucho precisar estas diferencias sustanciales”, añadió.
Finalmente, Sánchez-Camacho ha asegurado que “el balance de su gobierno también es el de la división entre los catalanes, con la elaboración de un fichero para distinguir entre catalanes de primera y catalanes de segunda”. “Pero aquí hay un partido que no permitirá que los catalanes que representamos, más de medio millón, se les trate como catalanes de segunda”, ha concluido.









