
La primera intervención era desarrollada a primera hora del lunes, a la llegada de un vuelo procedente de Bogotá, allí los agentes de la Guardia Civil hicieron pasar medidas fiscales a un pasajero, localizando entre su equipaje 20 bolsas de caramelos. Tras analizar el contenido de los mismos resultaron contener cocaína, hecho que motivo la detención de un ciudadano español de 36 años, que tiene fijada su residencia en Santa Pola (Alicante).
Poco después, tras la llegada de un vuelo procedente de Venezuela, se detectaron dos maletas que no fueron recogidas, y que los agentes pasaron a través de lo escáneres del aeropuerto, observando la presencia de gran cantidad de paquetes rectangulares. Tras proceder a la apertura, fueron localizados 44 envoltorios que resultaron contener un kilogramo de cocaína cada uno.
La última intervención se realizaba por la tarde del mismo día, en esta ocasión resultó detenido un ciudadano colombiano, a quien la Guardia Civil localizó en su equipaje catorce botes de crema cosmética para hombre, a los que se les había practicado un doble fondo y que contenían 1.050 gramos de cocaína.
Los detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente.












