
El Fondo Monetario Internacional (FMI), aprobó una resolución de dos años a favor de Colombia en el marco de la Línea de Crédito Flexible (LCF) por un monto equivalente a DEG 3.870 mil millones (alrededor de US$5.84 mil millones).
El acuerdo aprobado por el Directorio Ejecutivo del FMI responde a la solides que muestra la economía del país suramericano, donde, según el organismo internacional, se destaca el régimen de inflación objetivo, un tipo de cambio flexible, una eficaz supervisión y regulación del sector financiero y un política fiscal basada en una regla del balance estructural para el gobierno central (Regla Fiscal), entre otros factores.
De la misma forma se valoró las políticas instauradas por las autoridades colombianas, quienes han demostrado y establecido la confianza necesaria para seguir aplicando medidas que favorezcan el desarrollo económico del país, además de impulsar el crecimiento sostenido en la actualidad.
“Las autoridades están firmemente comprometidas a mantener estas políticas y a emprender nuevas iniciativas —incluida la reforma fiscal aprobada recientemente— a fin de estimular el crecimiento, reducir la desigualdad y reforzar aún más la capacidad de resistencia de la economía”, destacó el Primer Subdirector Gerente y Presidente Interino del Directorio, David Lipton.
En este sentido el representante del FMI, acotó que Colombia ha instaurado políticas macroeconómicas que han permitido hacer frente de forma exitosa el difícil panorama financiero internacional, no obstante, pese a estos buenos indicadores instó a las autoridades a ser cautos ante los desequilibrios de los mercados internacionales que podrían afectar la economía y las cuentas externas del país suramericano.
“Las políticas macroeconómicas aplicadas afianzaron la capacidad de resistencia de Colombia para hacer frente a la crisis financiera mundial y respaldaron una sólida recuperación y una reconstitución gradual del margen de maniobra de la política económica”, afirmó Lipton.
Por otra parte se detalló que el acuerdo prevé entregar un apoyo y respaldo a las autoridades colombianas para “enfrentar eficazmente los choques que puedan surgir en el futuro y a mantener un sólido desempeño económico”, por mientras las autoridades continúan en el proceso de consolidación económica.
A su vez las autoridades colombianas, manifestaron su intención de asignar al acuerdo carácter precautorio y no prevén utilizar los fondos.












