
El avión en el que viajaba el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, tuvo que efectuar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de la ciudad de Tarija, al constatarse que tenía desperfectos técnicos en su tren de aterrizaje al llegar a su destino original, Yacuiba.
“Al sobrevolar la ciudad de Yacuiba, el piloto de la aeronave de la Fuerza Aérea Boliviana, con placa de control FAB – 002, del que se desconoce su nombre, reportó que el tren de aterrizaje izquierdo no descendió, por lo que se acercó a la torre de control del aeropuerto de esa comuna para que tuvieran contacto visual y verificaran de que no se tratase de un problema eléctrico de la consola de control del avión”, detalló el Gobierno boliviano.
Ante esta situación, el piloto del avión informó a las autoridades del puesto de control aeroportuario que desviaría el vuelo a otra terminal aérea que tuviera más espacio para aterrizar por lo que se dirigió al aeropuerto de la ciudad de Tarija.
En este marco el piloto sobrevoló durante unos minutos el área, de manera de agotar el combustible y así prevenir un posible incendio al momento del aterrizaje forzoso.
“Posteriormente el piloto realizó un primer intento de aterrizaje con la esperanza de que con el golpe se liberara el tren de aterrizaje, pero falló y tuvo que alzar nuevamente vuelo”, se informó en un comunicado de prensa, agregando que tras esta maniobra en piloto intento nuevamente aterrizar situación que obtuvo su recompensa ya que el avión “tomo tierra” sin mediar heridos ni hechos que lamentar.









