El Consejo de Ministras de la Mujer de Centroamérica y República Dominicana del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), abogó por frenar la violencia contra mujeres que ejercen la representación política.
Ante esto se argumentó que el acoso y la violencia política en razón de género provienen de hombres y también de mujeres que pertenecen o a otras instancias partidarias, sindicales, comunales, gremiales, campesinas e indígenas, frenando su correcto desarrollo y desenvolvimiento en este tipo de instancias a la que han sido electas.
“La violencia política impide a las mujeres el ejercicio pleno de su derecho a la participación política, obstaculizándoles el cumplimiento de una responsabilidad para la cual han sido electas. Es una forma de violencia con repercusiones individuales y colectivas, ya que cada vez que se niega a una mujer el derecho al ejercicio de representación política, se violenta el derecho de todas las mujeres, a tener representantes en las instancias públicas de toma de decisiones”, se afirmó desde la web del organismo internacional centroamericano.
En este sentido se argumentó que los orígenes de la violencia contra las mujeres en este ámbito, se deben a una sociedad patriarcal, la que no considera a las mujeres como participes de las prácticas políticas, fomentando de esta forma la discriminación basadas en relaciones desiguales de poder, la subordinación genérica, prevaleciendo los patrones sociales culturales masculinos.
Ante esto los países centroamericanos por intermedio del Consejo de Ministras de la Mujer de Centroamérica y República Dominicana del Sistema de la Integración Centroamericana, advirtieron que en todos los países de la región sucede este tipo de violencia, ya sea física o psicológica, incluyendo el femicidio, por lo que representa un tema de urgente y de prioridad para el conglomerado y se ha incluido como eje transversal en su Plan Estratégico 2009-2013.












