Este sábado 1 de septiembre entró en vigor el Tratado de Libre Comercio entre México y los países de Centroamérica, que en una primera etapa beneficia de forma directa a Nicaragua y El Salvador, a la espera de que Honduras, Guatemala y Costa Rica regulen los procedimientos jurídicos burocráticos, para que este acuerdo comercial entre en vigor lo más pronto posible para estos países restantes.
El Salvador, Nicaragua y México serán “los primeros países en poner en vigencia” el tratado único, debido a que “los demás países de la región aún se encuentran en el proceso de ratificación” en su respectivo Parlamento, se explicó desde el ministerio de Economía de El Salvador.
La iniciativa contempla la unificación del 98 por ciento de las clausulas jurídicas de comercio, que tenía México con las diferentes naciones centroamericanas en diferentes acuerdos bilaterales e independientes en este sector.
Ante esto se espera que el acuerdo comercial fortalezca los encadenamientos productivos, fomente la economías de escala, además de tornar a las empresas más eficientes en productividad y ahorro de tramites burocráticos, entre otros factores de desarrollo.
Además se destaca la creación de un nuevo espacio económico y jurídico ampliado que contribuirá a facilitar el comercio, a fomentar la integración regional y a reducir los costos de las transacciones comerciales.
La Secretaría de Economía mexicana, informó con anterioridad que el país azteca, tiene inversiones por 5 200 millones de dólares en sectores como telecomunicaciones, alimentos, manufacturas, entretenimiento y energía.
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