María del Huerto Varela dirige la pieza teatral “Círculo de Tres”, de Álvaro Ángel Malmierca, en el Teatro del Centro de Montevideo. Ante el resonante éxito de público y de crítica, ICNDiario ha entrevistado a la responsable de la puesta en escena, quien con atinada dirección, ha logrado el notable resultado que se aprecia y potenciar al máximo las bondades de los grandes actores a quienes le ha tocado dirigir, así como encarar un texto que se las trae, acompañada por un equipo técnico del más alto nivel.
Su trayectoria como directora teatral se inicia con la puesta en escena de Terror y Miseria del Tercer Reich de Bertolt Brecht. Posteriormente monta La Casa de Bernarda Alba de Federico García Lorca, El hombre que confundió a su mujer con un sombrero de Peter Brook, Esa relación tan delicada de Loleh Bellon, Cigarros de Paul Auster, Las sirvientas de Jean Genet, Inventarios de Philippe Minyana, El tiempo y los Conway de John Priestley. Los de siempre, fusión de las historias de Canillita y En familia de Florencio Sánchez, Sueño de una noche de verano de William Shakespeare, Viaje de un largo día hacia la noche de Eugene O’Neill, Circulo de tres de Álvaro Malmierca
Ha realizado adaptaciones y escrito obras teatrales (Me llamo barro aunque Miguel me llame, Buscando a Federico…). En la revista teatral Socio Espectacular tiene un espacio llamado La trastienda del teatro donde realiza entrevistas a personalidades de la cultura uruguaya y extranjera. Es, además, Licenciada en Bibliotecología.
En 2001, recibe una beca de reconocimiento de la Embajada de Francia en Uruguay para el Teatro Nacional de Estrasburgo. En 2008 es becada por el Ministerio de Cultura español para realizar una estancia en el Centro de Documentación Teatral de Madrid.
María del Huerto Varela, integra el elenco estable del Teatro Circular de Montevideo desde 1976 donde ha desarrollado su carrera actoral, interpretando obras del repertorio clásico y contemporáneo, en Uruguay y en el exterior.
Esta uruguaya multifacética, protagoniza la entrevista cultural de la semana en ICNDiario.
– ¿Cuándo comenzó a dirigir?
– Fue en el 2000 con Terror y Miseria del Tercer Reich” de Bertolt Brecht, empecé el nuevo siglo con un cambio importante en mi actividad artística, sentí la necesidad de hacer teatro desde otro lado, empezar el trabajo creativo desde un todo y no desde la particularidad que es el personaje. Soy actriz y docente de teatro desde hace muchos años, también en plena formación y estando en la EMAD, la escuela de teatro, hice muchas asistencias de dirección con importantes directores, todo eso fue un campo fértil para poder dar los primeros pasos y continuar en la dirección. Fue importante para mi comienzo el haber realizado un Brecht, ya que los buenos textos son generosos con todos los que trabajan con él. También conté con actores de experiencia y el Teatro Circular de Montevideo que me respaldó incondicionalmente. Tuve buenos maestros que fueron una guía fundamental para mis comienzos y aún lo son. Creo firmemente que todo artista tiene que seguir estudiando e investigando todas las posibilidades creativas que pueda ofrecer esta profesión, por esa convicción aborde la dirección.
– ¿Cómo ve el teatro uruguayo?
– Es un momento de mucho empuje y con muchas ganas de hacer cosas. Hay una diversidad de propuestas, de estéticas y lenguajes que para el público lo hace interesante. Las nuevas generaciones tienen una postura clara sobre la profesionalización, quieren y trabajan fervorosamente para vivir de su profesión artística y esa meta es la que los lleva a generar sus propios trabajos, donde el riesgo va desafiando la creación en el día a día. Uno de los debe del teatro uruguayo es la necesidad de confrontación con otros espectáculos extranjeros, tanto con la posibilidad de salir hacia el exterior como por el hecho de poder ver en nuestra carteleras teatro de otras nacionalidades.
– ¿Se necesita mayor apoyo estatal para el teatro?
– Hoy tenemos un mayor apoyo estatal, se consiguieron recursos que antes no teníamos, pero siempre es poco para la cultura en general. El teatro se ha mantenido gracias al esfuerzo y sacrificio de los teatristas, nuestros teatros no tienen suficientes recursos, ni hay demasiados apoyos privados para poder generarlos y crear fuentes de trabajo. Tenemos una historia de teatro independiente, donde elencos como el Teatro Circular de Montevideo y la Institución Teatral El Galpón poseen salas propias, pero son los menos. Los artistas independientes necesitan sus propios espacios o salas con las condiciones necesarias para poder mostrar su trabajo y para poder dedicarse más a la parte creativa y no estar sacrificando, muchas veces, la creación porque lo económico no cubre la propuesta primaria. Tenemos la obligación como trabajadores de la cultura de exigir políticas culturales, donde haya un fuerte compromiso de los gobiernos en apoyar a toda la cultura en general. La cultura es fundamental en el desarrollo económico y social de cualquier país.
– Uruguay cuenta con grandes actores reconocidos a nivel internacional, ¿siguen surgiendo valores?
– A pesar de que somos un país pequeño y poco poblado siguen surgiendo muy buenos artistas. El teatro uruguayo está considerado como uno de los mejores de América Latina. Por suerte para las nuevas generaciones sigue habiendo, pocos, pero buenos referentes para guiarlos en su formación y así conquistar y abrir nuevas fronteras.
– ¿Qué significa para usted dirigir a dos grandes de la escena uruguaya, como Estela Medina y Berto Fontana?
– Un honor, para mi persona y para mi carrera. Son grandes referentes de nuestro teatro. Al trabajar con ellos uno comprueba que es esa frase tan manida, siempre hay algo más que aprender, es una gran verdad. Estela Medina, primerísima actriz de nuestro teatro con más de 150 personajes realizados, la mayoría de ellos, cuando integraba el elenco de la Comedia Nacional. Una actriz que ha cosechado y seguirá teniendo premios de reconocimiento por su labor artística tanto en Uruguay como en el exterior. Roberto “Berto” Fontana, fundador del Teatro Independiente de Montevideo, actor, profesor de fonética, maestro de varias generaciones de actores, entre ellas la mía. Además debemos agregar que después de más de cincuenta años de carrera de cada uno de ellos es la primera vez que trabajan juntos en una obra de teatro. Por todo esto me siento partícipe de estar en un acontecimiento de relevancia para nuestro teatro.
– Háblenos de “Círculo de Tres”, la obra de Álvaro Ángel Malmierca que están representando estos actores en el Teatro del Centro.
– Mi entusiasmo por trabajar con ellos era tal que dije que sí a un proyecto que no había leído, por supuesto, sabía que la obra que íbamos a hacer era de Álvaro Malmierca, ya eso era una garantía. Cuando Berto me la dio para que la leyera, en ese momento pensé que sería un compromiso para mí tener que rechazarla si no me gustaba. Pero fue empezar a leerla y darme cuenta que era una obra a la medida para ellos. Me atrapó a tal punto que no paré de leerla hasta llegar a su fin. Es una obra donde los personajes te hacen entrar y ser testigo del laberinto de sus propias vidas. El amor, las ilusiones, la pérdida, los cambios, la vida de cada uno de ellos se mezcla, se separan y se vuelven a mezclar. Lo onírico juega con la realidad, esa realidad deja una puerta abierta para que se filtren los sueños. Es una gran obra, llena de magia y poesía. Álvaro Malmierca es un gran dramaturgo que sabe ahondar en la sensibilidad de los personajes y en las situaciones que va creando y tiene un don de la palabra increíble. A medida que uno va ensayando va descubriendo las bondades de los autores y así pasó con Malmierca. Pasaba el tiempo y cada vez nos gustaba más la obra y siempre había algo más que decir sobre ella.
-Cuéntenos sus proyectos para el futuro.
-Tengo proyectos y propuestas para el año que viene pero todavía no tengo certeza de las obras a realizar.












