Inés del Río Prada, condenada a más de 3.000 años de cárcel por su intervención en varios asesinatos realizados por ETA, tiene el beneficio que insólitamente le otorga el Tribunal Europeo de Derechos Humanos con sede en Estrasburgo, que condena a España a pagar una indemnización de 30.000 euros por daños morales a la etarra mencionada y a “poner en libertad a la demandante en el plazo de tiempo más breve posible”.
Inés del Río Prada integraba uno de los más sanguinarios y crueles “comandos Madrid”, en compañía de José Ignacio de Juana Chaos y participó en el atentado donde murieron 12 policías en la plaza de la República Dominicana de Madrid en 1986.
Los jueces se pronuncian sobre la aplicación de la llamada ‘doctrina Parot’ y la Audiencia Nacional por retrasar la salida de prisión de la etarra, desde el 2 de julio de 2008 hasta el 27 de junio de 2017.
El Tribunal entiende que España vulneró el artículo 7 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, que dice que no puede existir una pena sin ley que la avale, el artículo 5, que contempla el derecho a la libertad y la seguridad.
Según explica la Cadena Ser de España: “Las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) se consideran “declarativas” y “no directamente ejecutables”. Es decir, tienen que ser observadas pero en la práctica no tienen efecto directo. Y esto es así porque en España no tenemos un mecanismo, una regulación expresa sobre el procedimiento a seguir para poder revisar sentencias ya firmes por mucho que Estrasburgo afirme que “hay una violación de derechos”.
De cualquier manera el Gobierno de España anuncia que recurrirá la sentencia de Estrasburgo y advierte de que no excarcelará a la etarra, y el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha calificado esta sentencia de lamentable y de haber sido anunciada el mismo día en el que se cumple el quince aniversario del secuestro y posterior asesinato del concejal del PP de Ermua, Miguel Ángel Blanco.









