
El llamamiento realizado al resto de mujeres de las cuencas de Asturias para iniciar movilizaciones pacíficas con el fin de llamar la atención del Gobierno ha tenido un notable éxito como la visita al Senado para protestar por los recortes al sector o diversas marchas, como las emotivas y solidarias caminatas nocturnas realizadas esta semana. Además, han bloqueado carreteras, ofrendas a los monumentos mineros, realizado concentraciones y recaudado fondos para las familias de los que se encuentran encerrados en las húmedas profundidades de los pozos Santiago y Candín desde hace 50 días, así como los que llevan casi un mes en el ayuntamiento de Cangas del Narcea.

Otras compañeras participan desde en las movilizaciones desde dentro, como las trabajadoras de la minería que, además, han participado en la marcha hasta Madrid. Mujeres que llevan en su sangre la oscura y dura profesión de extraer carbón: Las preferencias laborales directas propiciadas por la empresa estatal aseguraba un puesto en los pozos con el fallecimiento de un familiar en accidente laboral. Un caro precio por un trabajo en uno de los sectores considerado de los más peligrosos del país. Aunque la minería imprime carácter, no es fácil ocupar una profesión a sabiendas que se ha llevado a cambio a un padre o un hermano.










